¿Conoces la Barcelona World Race? ¿No? Pues se trata de una regata de gran prestigio internacional. Éstas son competencia deportivas de velocidad en la que participan embarcaciones a vela o de remo. La Barcelona World Race se trata de embarcaciones a vela y se diferencia de otras regatas por algo muy especial: es la única que da la vuelta al mundo sin interrupciones.
La competencia implica recorrer 23 mil millas náuticas (44.448 kms.) en alrededor de 90 días sin escalas ni detenciones. Premisa que suena similar a la del conocido libro de Julio Verne, pero en un poco más de tiempo y exclusivamente navegando, sin parar. Sin duda, un gran esfuerzo, no sólo físico, sino también psicológico para todos los participantes.
La carrera comenzó el 31 de diciembre y un chileno, José Muñoz, se encuentra actualmente en el segundo lugar junto a su compañero, el español Guillermo Atadill. El simple hecho de estar participando en la Barcelona World Race le implicó abandonar todas las rutinas que la mayoría de nosotros consideraría normales. Los participantes tienen intervalos de sueño de dos a tres horas y se encuentran en una cabina de no más de 10 metros cuadrados, con su compañero de equipo como único acompañante en los 90 días que se espera que dure la travesía, soportando toda clase de condiciones climáticas, favorables y adversas.
Estas particulares condiciones hacen que este desafío emprendido por el chileno vaya más allá de una simple competencia, se convierte en toda una experiencia de vida en la que se enfrentan situaciones extremas, poniendo a prueba la resistencia física de los competidores, su capacidad de trabajar en equipo e incluso de adaptar totalmente su alimentación a la regata.
Foto por: Jorge Andreu
La embarcación en la que José debe completar el recorrido es una IMOCA 60, un barco de 18 metros de longitud. En ella, los navegantes deben ser totalmente autosuficientes. No hay cabida para muchos lujos: cuentan con comida de sobre, literas para dormir y unas pocas mudas de ropa para tres meses de navegación continuada.
Dicho todo esto, resta la pregunta, ¿cuáles son los principales desafíos que enfrentan los competidores durante estos 90 días?
Y bueno, con tantos riesgos y complicaciones, ¿qué podría motivar a alguien a querer participar en una competencia así? El mismo desafío a la naturaleza y vida al límite parecen ser parte del atractivo que lleva a los navegantes a protagonizar esta singular aventura. Además, la hazaña de dar la vuelta al mundo en tiempo record es un sueño que inspira a más de alguno. Sin duda, así ya lo pensó el propio Julio Verne.
Si bien no todos podemos salir a navegar por tres meses ininterrumpidos alrededor del mundo, los organizadores de la carrera habilitaron una opción virtual para que, desde la comodidad de nuestro hogar, podamos participar de la regata y competir contra los navegantes del Barcelona World Race en tiempo real y con visualización 3D. Esta es The Game, juego que permite simular nuestra participación en la competencia y disponible para ser descargado en computadores, teléfonos móviles y tablets desde www.thegame-barcelonaworldrace.org.