Imagen: César Mejías

#Respect: 4 discos para entender el legado de Aretha Franklin

La justa merecedora del título de “Reina del Soul” nos ha dejado. Entre nosotros quedan sus seis décadas de trayectoria, sus 50 álbumes publicados y su historial de liderazgo en cambios culturales y movimientos sociales. Pero, ¿cómo le explicamos el legado de Aretha Franklin a quien nunca escuchó su música? Quizás esta selección discográfica sea de ayuda.

Por Martín Poblete @martin_poblete | 2018-08-17 | 15:45
Tags | soul, funk, blues, aretha franklin, afroamericana, feminista, cantante, música

La reina ha partido.

Tras una larga batalla contra el cáncer de páncreas, este jueves 16 de agosto la voz más importante del soul, Aretha Louise Franklin, partió a los 76 años de edad.

Con una carrera que comenzó en los años ’50, Aretha Franklin se posicionó como una de las cantantes más importantes de la historia de la música. Con 18 Premios Grammy, 75 millones de álbumes vendidos en todo el mundo y reconocimientos en el UK Music Hall Of Fame, el Gospel Music Hall Of Fame y el Salón de la Fama del Rock and Roll, del cual fue la primera artista mujer en ser introducida, Aretha Franklin se convirtió en una de las voces más importantes de todos los tiempos. Tal fue su influencia y legado, que la revista Rolling Stone le otorgó en 2008 el primer lugar en el ranking de los 100 más grandes cantantes de todos los tiempos.

Es difícil vivir en este mundo sin haber escuchado nunca a Aretha Franklin. Pero es probable que, a pesar de saber de su existencia, muchos que hasta ahora nunca le hayan prestado atención. Y eso está perfectamente bien.

Si no conoces la historia de Aretha Franklin y deseas saber más de su música, presta atención. Hemos elegido los cuatro discos clave para entender su legado, más algunas menciones honrosas.

1. Songs of faith (1956)

El góspel para fue para ella mucho más que solo el punto de inicio de su carrera como cantante: fue un elemento fundacional en la música de Aretha durante toda su carrera.

En 1956, con apenas 14 años, la talentosa cantante y pianista debutó en la industria discográfica con este bello registro de góspel en vivo. El disco fue grabado en la Iglesia Bautista de New Bethel, la misma donde su padre (y manager) C.L. Franklin ejercía como pastor. La prodigiosa interpretación de parte de la joven, sumada a los aplausos y alabanzas de feligreses presentes en el público, hacen de este un registro tan conmovedor como espontáneo.

Este fue el primer episodio de una serie de idas y venidas a este género que alcanzarían su peak con el premiado álbum en vivo Amazing Grace (1972), el más grande éxito de ventas de toda la carrera de Franklin.

2. I never loved a man the way I love you (1967)

Tras un giro a la música secular con su disco In person with the Ray Bryant Combo (1961), la música de Franklin comenzó a escalar rápidamente, ganando en pocos años la posición de referente de la música pop.

Pero fuera de su incuestionable calidad musical, uno de sus grandes méritos fue la creación de la banda sonora para los movimientos sociales en los años ’60 y ‘70. Una artista que, siendo mujer, y además afroamericana, se constituyó como una de las figuras más fuertes e influyentes de su época.

En este disco encontramos dos de sus canciones más importantes: la sentida balada soul I never loved a man the way I love you, que da el nombre al disco, y la atrevida Respect, la misma que al poco andar se convertiría en un himno de los movimientos feministas.

Aunque Respect fue originalmente escrita y publicada por Otis Redding en 1965, fue Franklin quien dos años después logró darle una vuelta de tuerca y cambiar la intención del tema. Otis Redding cantaba desde una perspectiva masculina de jefe y proveedor de hogar, como el hombre que se mata trabajando y exige algo de respeto al llegar a casa. La versión de Aretha, en cambio, si bien no tenía grandes variaciones en la letra, logró voltear las cosas y convertirse en la canción de la lucha feminista en el propio hogar: “te amo, estoy aquí para ti, pero quiero que me respetes”, sería a grandes rasgos el discurso de fondo.

Por esta relevancia social, y por la impecable factura del disco en general, es que I never loved a man the way I love you es considerado por muchos como el mejor disco de Aretha Franklin. En 2003, la revista Rolling Stone lo puso en el puesto 84 de los 500 mejores discos de todos los tiempos, y en 2017 Pitchfork le dio el décimo lugar entre los 200 mejores álbumes de la década de los ’60.

3. Lady soul (1968)

Para fines de los ’60 el soul era uno de los géneros musicales más populares del mundo. A pesar de que entre 1964 y 1967 habían perdido de forma sorpresiva a Sam Cooke y a Otis Redding, dos de sus más grandes ídolos, la música negra en general estaba viviendo un gran momento: mientras Albert King publicaba su mítico Born under a bad sign (1967), el primer disco de blues moderno, James Brown consagraba su fama con una sorprendente seguidilla de 18 discos lanzados entre 1966 y 1969, y Aretha Franklin consolidaba su posición como reina del soul con Lady soul (1968), uno de los álbumes más importantes para su discografía y para el género.

Con canciones icónicas como Chain of fools y (You make me feel like) a Natural woman, más la notable participación de Eric Clapton (con apenas 23 años) en el blues Good to me as I am good to you, Lady soul pasó a la historia como uno de los discos más exitosos de Aretha Franklin, y como uno de los mejores álbumes de la historia de la música en general.

Como dato freak: Lady soul obtuvo el 85° lugar en el ranking de los 500 mejores discos de todos los tiempos, inmediatamente después del álbum I never loved a man the way I love you, publicado un año antes.

4. Who’s zoomin’ who? (1985)

Los avances tecnológicos de la década de los ’80 trajeron consigo drásticos cambios en la música. Se masificó el uso de sintetizadores, aparecieron las primeras cajas de ritmos, se inventaron nuevas y más prolijas técnicas de grabación y el sonido de la música pop en general evolucionó hacia un sonido completamente distinto a todo lo que se había hecho antes.

Atraída por este nuevo sonido, Aretha Franklin, buscó ajustar su música a lo que estaba sonando en la radio. Y aunque la historia reciente ha demostrado que adaptarse a las nuevas tendencias es una movida arriesgada (y a veces puede terminar muy mal), en este caso el resultado fue notable. Está claro que géneros tan ochenteros como el new wave, el dance y la música disco son géneros emparentados con el soul en cierta medida, y Who’s zoomin’ who fue prueba de ello. No por nada ganó el Grammy a la Mejor Interpretación Vocal Femenina en R&B, para luego convertirse su primer álbum en obtener la certificación de disco de platino.

Por otra parte, la colaboración con Eurythmics en la canción Sisters are doin’ it for themselves reafirmó su rol como referente feminista y posicionó a Franklin, que para entonces contaba con 42 años de edad, como una artista plenamente vigente.

Esta selección, bajo ninguna circunstancia pretende ser una palabra final, todo lo contrario, es una introducción e invitación para que quienes quieran conocerla, puedan comenzar a entender y disfrutar de su música. De hecho, estos cuatro discos representan una mínima parte de la amplia discografía de Aretha Franklin. 

¿Con cuál de sus cuatro discos te quedas?