¿Hablas solo? Es más común de lo que crees y estos son sus sorprendentes beneficios

Admitamos que todos nos hemos pillado hablando solos en alguna ocasión, muchas veces incluso sin darnos cuenta, hasta que alguien se ríe y nos apunta. ¡Pero tiene muchísimos efectos positivos en las personas! Aquí te contamos cuáles.

Por María Victoria Coutts | 2019-01-17 | 11:26
Tags | hablar, hablar solo, memoria, confianza, motivación
“Si hablamos con nosotros mismos para preservar el control durante la realización de pruebas exigentes, el rendimiento mejora de manera sustancial cuando lo hacemos en voz alta” (Paloma Mari-Beffa, profesora de neuropsicología y psicología cognitiva).

Lo socialmente “normal” es hablar con otra persona, una o varias; hablar con uno mismo lo vemos como algo poco común e incluso raro, pero seamos sinceros, ¡todos lo hacemos!

La mayor parte del tiempo hablamos en silencio, cuando pensamos, por ejemplo, que es nuestra voz interna la que habla. Sin embargo, también hay ocasiones en las que esa voz sale y puede ser escuchada por ti o por quienes estén cerca tuyo y eso no tiene nada de malo, de hecho incluso tiene beneficios.

Esa conversación puede ayudar a que te desahogues, reír, resolver dudas, problemas o simplemente servir de compañía. Por otro lado, las autoconversaciones también son una herramienta poderosa y, aunque no reemplazan a las pláticas persona-persona, merecen que les pongamos un poco más de atención.

El poder de las autoconversaciones

La profesora de neuropsicología y psicología cognitiva de la Universidad de Bangor (Gales), Paloma Mari-Beffa, explica en The Conversation que las conversaciones con uno mismo mantienen el cerebro activo, ayudan a organizar los pensamientos, planificar, consolidar la memoria y a dar forma a las emociones.

De hecho, un estudio asegura que si no tuviéramos estas autoconversaciones (silenciosas o en voz alta), ¡el cerebro humano podría funcionar como el de los monos! Ya que cuando hacemos algo, necesitamos “decirnos” qué es eso que haremos. De lo contrario, si no podemos escuchar nuestra voz, activamos de manera separada las áreas visuales y auditivas del cerebro para resolver cada tarea, tal como lo hacen los monos. Pero hay más y aquí te lo contamos:

Escucharte mejora el control sobre las tareas que realizas

Tanto la conversación silenciosa como la que se hace en voz alta tienen sus beneficios, pero a la hora de tener que llevar a cabo una tarea, hablar y escuchar tu voz parece ser más efectivo que escuchar tu voz interna. Así lo comprobaron Mari-Beffa y su colega Alexander Kirkham, quienes le dieron una serie de instrucciones escritas a 28 personas y les pidieron que las leyeran en silencio primero y luego en voz alta. Los investigadores midieron la concentración y el rendimiento de los participantes y todos mejoraron cuando las instrucciones fueron leídas en voz alta. ¿La razón?

Al parecer, los comandos auditivos serían mejores controladores de nuestras acciones que los escritos. “Los resultados que obtuvimos demuestran que si hablamos con nosotros mismos para preservar el control durante la realización de pruebas exigentes, el rendimiento mejora de manera sustancial cuando lo hacemos en voz alta”, asegura Mari-Beffa.

También agrega que una de las mejores herramientas que tienen las personas para el control cognitivo, es la habilidad para generar autoinstrucciones claras. “Y su efectividad aumenta simplemente cuando se dicen en voz alta”, sostiene.

¡Mejora tu confianza y motivación!

Hablar con uno mismo para motivarse, también conocido como diálogo interno automotivacional, es una de las estrategias que utilizan muchos deportistas profesionales (algo que ya te adelantamos hace un tiempo). La razón para hacerlo es que los ayuda a calmar el estrés y concentrarse en la competencia con una mejor actitud y motivación.

Aunque lo tuyo no sea el deporte de alto rendimiento, esta es una técnica que puedes usar antes de enfrentar un desafío como un examen, una entrevista de trabajo o una presentación importante, por ejemplo.

No tengas miedo ni vergüenza de decirte a ti mismo “dale, tú puedes”, estas frases de ánimo tienen más poder del que crees. Por lo menos eso reflejan los estudios que se han publicado sobre este tema. En definitiva, entablar una pequeña conversación positiva con uno mismo, genera resultados positivos y a veces solo con una frase de ánimo, basta para creerse el cuento y dar lo mejor de uno. 

Conviértete en un experto en encontrar objetos

Está estudiado que repetir en voz alta lo que queremos recordar, nos ayuda a lograrlo. En una investigación le mostraron a un grupo de personas 20 imágenes de varios objetos distintos y luego les pidieron que encontraran uno en particular. Primero, simplemente les indicaron qué objeto debían encontrar, y luego hicieron el mismo ejercicio, pero con un pequeño cambio: les pidieron repetir en voz alta el objeto que buscaban.

Con este ejercicio, los investigadores se dieron cuenta de que hablar consigo mismas, ayudaba a las personas a encontrar los objetos más rápidamente que cuando no decían nada.

Suponen que esto ocurría porque escuchar una palabra con la que estamos familiarizados, estimula el cerebro y ayuda a procesar la información más rápido.

Un buen dato para ponerlo a prueba la próxima vez que se te pierdan las llaves de la casa o quieras encontrar algo en tu refrigerador. ¿Quién no ha estado varios segundos frente al refrigerador sin recordar qué es lo que iba a buscar?

Ya sabes, no eres el único que habla solo y hacerlo no es algo raro. Es una herramienta a la que se le debe sacar partido, porque te puede ayudar a memorizar y entender la materia para un examen, a encontrar objetos en tu casa o incluso a convencerte de que puedes lograr algo.

¿Sueles tener conversaciones contigo mismo? ¿Sobre qué?