Sin ser un ambientalista activo, a Gregg Segal, un fotógrafo norteamericano, le chocaba la idea de nuestra relación con la "invisible" basura. En Estados Unidos, cuatro millones de toneladas de desperdicios se van semanalmente en camiones lejos de los ojos de quienes las produjeron, limpiando no solamente las calles, sino también sus conciencias. Una vez que esa bolsa llena de residuos y material desechable deja de existir en nuestro entorno cercano, también deja de ser una preocupación, desentendiéndonos de su impacto ambiental. Pero no para Segal... y por eso se le ocurrió un experimento que concientizara sobre el impacto que tiene nuestro modo de consumir y la relevancia que tiene lo que haga cada uno nosotros por cuidar el medioambiente.

Durante una semana, el fotógrafo le pidió a familias de distintos tamaños y niveles socioeconómicos, que en vez de botar la basura, la guardaran. Todo. Cada caja de pizza y cascara de plátano. Luego, tendrían que acostarse con ella en ambientes naturales para así plasmar la íntima relación que tiene la basura que generamos con la preocupación ambiental que existe. Unos lo hicieron voluntariamente, otros por una suma de dinero, pero el resultado fue igualmente impactante.

Para este montaje, Greg revistió de plástico negro un marco y lo llenó de agua (14'' aprox. de profundidad)

En este caso, el fotógrafo hizo una cama se musgo, ramitas, hojas y conos de pino para simular el suelo del bosque.

Con 1.000 kilos de arena, alegas y conchas, Segal logró ambientar una playa en su estudio. 

"Tengo la intención de continuar la serie, la creación de otros entornos (o cambiarme de ubicación si es necesario): una llanura nevada, una zona rocosa, un campo de flores silvestres, etc. El punto es poner de relieve cómo la basura es omnipresente; ningún rincón de la tierra está sin tocar", dice el fotógrafo. 

De todos los latinoamericanos que vean las fotos de Gregg Segal, debiera ser a los chilenos a los que más les incomode. Y es que somos los líderes del continente en generación de basura, con 16,9 millones de toneladas anuales. De todas ellas, se recicla aproximadamente un 10%. 

Uno de los descubrimientos del fotógrafo norteamericano es la falta de información que manejan las personas respecto a los productos reciclables. Cuando les pidió que conservaran su basura, les dijo que separaran lo que se podía reciclar, sin embargo seleccionaron un porcentaje mucho menor de lo que realmente podía ser tratado nuevamente. 

Para que no cometamos el mismo error en caso de que Segal toque nuestra puerta y nos pida sacar una foto, este es un listado de productos que puedes reciclar:

Si vives en la Región Metropolitana, puedes revisar en el sitio Suma Verde del ministerio del Medio Ambiente, dónde se encuentra el "Punto Limpio" más cercano a tu hogar y además hay varios tips de cómo reciclar sin moverte de tu casa.