Imagen: Gojko Franulic

Con este simple giro, Suecia logró reducir la prostitución a un tercio

Mientras en Finlandia se trafican 15 mil mujeres al año, en su país vecino, Suecia, son solo 200. Más allá de los recursos, la clave se esconde en que multan a los clientes y no a las trabajadores sexuales.

Por Antonia Laborde @antonialaborde | 2014-08-12 | 12:13
Tags | Prostitución, Suecia, multa, hombre, derechos mujeres, igualdad, ejemplo, éxito, disminución comercio sexual
Unos dicen que la prostitución es el oficio más antiguo del mundo. Otros, la forma de esclavitud más perseverante. En unos países este trabajo está absolutamente prohibido, mientras que en otros se rige bajo las leyes del gobierno. Que unas lo hacen por necesidad y que otras simplemente por placer... Del comercio sexual se pueden decir muchas cosas, y es que todo depende del lente con que se lo mire. Y fue precisamente cambiando su perspectiva, que Suecia logró reducir dos tercios la prostitución en sus calles y un 80% su clientela: Ya no se vería a la mujer como la culpable, sino como la víctima.

Suecia es un país que lleva décadas luchando por la igualdad entre hombres y mujeres. Para modificar la ley sobre prostitución en 1999, logrando que el cliente fuera quien pagara la multa (entre mil y tres mil euros),  en vez del trabajador sexual, hubo 20 años de estudios e investigaciones por parte de grupos defensores de los derechos de las mujeres. Cuando esto se aprobó, más del 40% del Parlamento era femenino y la ministra de la Igualdad jugó un rol principal. 

No peleaban por pelear, los resultados lo demuestran: Mientras que en la vecina Finlandia se trafican las 15.000 a 17.000 mujeres, en Suecia las cifras van de 200 a 400 tras la aprobación de la ley.

La clave estuvo en cuatro puntos: 

A) Penalizar la compra de servicios sexuales.
B) Despenalizar la venta de servicios sexuales.
C) Entregar servicios sociales integrales a prostitutas que quieran dejar su ocupación.
D) Educar al público y a los oficiales sobre las causas y consecuencias del comercio sexual.

La ley señala que En Suecia "la prostitución es considerada como un aspecto de la violencia masculina contra mujeres, niñas y niños. Es reconocida oficialmente como una forma de explotación de mujeres, niñas y niños, y constituye un problema social significativo... la igualdad de género continuará siendo inalcanzable mientras los hombres compren, vendan y exploten a mujeres, niñas y niños prostituyéndoles".

¿Por qué no legalizar? La contundente evidencia a favor del enfoque sueco


La bandera de lucha de las autoridades suecas fue el reconocer que había un sesgo masculino frente la prostitución. Sin embargo, cuando se aprobó el proyecto creado por parlamentarios del oficialismo y la oposición, no hubo mayores cambios en los niveles de prostitución. Los países vecinos, que miraban escépticos todos estos cambios legales, estaban convencidos de que no tenía nada ver con feminismo ni machismo, sino que siempre ha existido el comercio sexual y siempre iba a existir. 

Sin embargo, las autoridades siguieron estudiando y revisando cada paso para detectar cuál era la traba, hasta que llegaron a las fuerzas de seguridad. No estaban pasando multas, no concebían pagar por sexo como un delito. Por lo que se les hizo una capacitación sobre el nuevo  planteamiento, que consistía en que la prostitución era una forma de violencia masculina contra las mujeres. Finalmente los agentes de policía lo comprendieron, los ciudadanos lo comprendieron, las autoridades lo comprendieron y hoy más del 80% apoya el plan para combatir la prostitución. Incluso, los países vecinos lo han comenzado a imitar como Noruega e Islandia. 

Escocia fue uno de los primeros en tantear terreno. El 2003 le encargó a la Universidad de Londres que hiciera un análisis integral de las distintas políticas de prostitución en países del mundo, sin contar los lugares donde era 100% penado. Australia, Irlanda y los Países Bajos fueron estudiados, arrojando los siguientes resultados:

Los países donde está legalizada o regularizada la prostitución, trajo como consecuencias:
  1. Aumento en todas las facetas de la industria del sexo.
  2. Marcado involucramiento del crimen organizado en la industria del sexo.
  3. Dramático aumento en la prostitución infantil.
  4. Explosión en la cantidad de mujeres y niñas extranjeras traficadas hacia la región.
  5. Incremento en la violencia contra las mujeres.
Por su parte, desde 1999 en Suecia no se ha visto sustituida la prostitución por redes  organizadas por internet y hoy es el mercado menos favorable para el tráfico de personas. Las personas ofreciendo comercio sexual han disminuido en dos tercios y los clientes que van por ellas en un 80%. La multa para los clientes es monetaria o de un año de cárcel si no paga. El 60% de las trabajadoras sexuales que ha asistido a los programas de apoyo, han podido abandonar su profesión. La mayoría de ellas acuden para superar la drogadicción, que finalmente es la que las tiene en la calle juntando plata para pagar lo que quieren consumir.

Años después de la modificación de la ley de prostitución en Suecia, se llenaron los vacios legales que había dejado la Ley de prohibición del Tráfico Humano para el Propósito de Explotación Sexual, otorgándole mayores facultades al gobierno para perseguir a las redes que trafican y apoyan el comercio sexual  a los reclutadores, trasportadores y anfitriones.

La mayoría de las corrientes aseguran que esta modificación no se imita por las sociedades machistas ¿Tú qué crees?