Si eres mujer y quisieras andar en bicicleta en Afganistán, recibirías amenazas y humillaciones. Hasta podrías ser agredida físicamente. Las mujeres no tienen derecho a pedalear sobre una bicicleta. Tampoco tienen derecho a hacer muchas cosas. La verdad es que ese país, no es un muy buen lugar para ser mujer.

El año pasado, los crímenes violentos contra las mujeres llegaron a niveles record, ya que entre marzo y septiembre aumentaron un 25% en comparación con el año pasado. También tienen una de las mayores tasas de mortalidad materna del mundo y una gran lista de aspectos negativos: bajos niveles de educación femenina, violencia sexual y matrimonios forzados, incluso para menores de edad. Grandes avances se han hecho desde que los talibanes dejaron el poder, pero cada aspecto para proteger a la mujer y darle más derechos es refutado por quienes consideran las nuevas normas como "anti islámicas".

Una de esas cosas "anti islámicas", como decíamos anteriormente, es que las mujeres se movilicen en bicicleta. Sin embargo, hay un grupo de ellas que decidió ignorar los cánones sociales y buscar la libertad a través del ciclismo. Se trata del Equipo Nacional de Ciclismo de Mujeres de Afganistán, que entrena diariamente (recibiendo insultos y amenazas) con el fin de llegar a las Olimpíadas de 2020.

"El deporte empodera en todas sus formas a las mujeres, dándoles fuerza, confianza y camaradería, pero particularmente la bicicleta representa la libertad de la movilidad", asegura a El Definido Shannon Galpin, creadora del movimiento Mountain2Mountain, organización que empodera a las mujeres en ese país a través del ciclismo.

Galpin ha ayudado a formar este equipo de ciclismo que sólo tiene 10 miembros de entre 17 y 22 años y que debe entrenar entre los insultos de los hombres y las piedras que los niños les tiran cuando practican en la carretera.

Según ella, la bicicleta podría ser una gran puerta hacia otros derechos por los que las mujeres afganas y también de muchísimas otras partes del mundo, han estado luchando por años. "El ciclismo como deporte abre la posibilidad de viajar por las carreras y así abrirles el mundo a las mujeres, en parte por ver nuevos lugares y conocer otras mujeres como ellas, pero de otros países. Mi esperanza es que con el tiempo, el deporte del ciclismo podría normalizar el uso de bicicletas para mujeres y niñas en Afganistán, proveyéndoles mayor acceso a la educación y atención médica en comunidades rurales y proveer una herramienta segura y efectiva para combatir la violencia de género", comenta.

El mes pasado Afganistán envió a la primera mujer ciclista a los Asian Games en Corea del Sur. Desafortunadamente, la competidora tuvo un accidente mientras entrenaba el día anterior a que comenzaran los juegos, por lo que no pudo competir. Pero aún así, Galpin lo ve como un gran logro: "El equipo se sigue desarrollando y más mujeres se unen todo el tiempo para aprender a andar. Los primeros pasos ya están dados. Además, las mujeres jóvenes están aprendiendo e enseñar a otras cómo andar en bicicleta, en otras áreas, completamente separadas de la Federación de Ciclismo",

Gapin también está documentando el esfuerzo de estas mujeres a través de Afghan Cycles una producción audiovisual que será estrenada el próximo año.

En el documental se podrá ver cómo la generación de niños post-talibanes usan la bicicleta como forma de manifestación de la libertad que te da ser una persona educada en sociedad. "Estas jóvenes lo tienen claro: mi hermano puede andar en bicicleta, ¿por qué yo no? Ellas saben que tienen ese derecho", explica Galpin.

Aún así, están consientes de los riesgos. Y también de los costos. Muchas mujeres por ejemplo, se convierten en la "deshonra" de sus familias por ser ciclistas. Sin embargo, Galpin ve esto como un proceso que la historia ya ha visto anteriormente. Según ella, las mismas amenazas e insultos recibieron las primeras mujeres en Estados Unidos y Europa que osaron subirse a una bicicleta en público. "Eran llamadas inmorales o promiscuas", explicó a The Atlantic. "Es esencialmente el mismo insulto en una cultura totalmente diferente".

Aquí puedes ver un trailer del documental que será estrenado el próximo año.

¿Crees que la bicicleta es una herramienta que sirva para empoderar a las mujeres?