Se podría decir que la delincuencia es un problema aquí y en la quebrada del ají... y la "quebrada del ají" sería en este caso Japón, un país que tiene fama de pacífico y honesto, pero ni así se libra de la acción de los cacos.

Por eso, puede ser un buen ejemplo mundial la ingeniosa solución con que dieron en Tokio desde hace un año, al menos en cuanto al robo en tiendas de conveniencia (como son aquí OK Market o Big John) con una estrategia tan original como sencilla.

Taxistas leyendo revistas: la última línea de defensa

Al igual que en nuestro país, también es en la noche el horario en que más robos a tiendas de conveniencia se cometen en Japón. Por esto, es que 500 negocios se organizaron y crearon la "Estrategia de defensa a medianoche". El programa consiste básicamente en que los minimarket ponen un cartel a partir de las 22:00 horas, que dice "Vigilancia reforzada", lo que en código significa que los taxistas se pueden estacionar sin problema en las plazas disponibles hasta las 7 de la mañana, entrar, tomarse un café e instalarse a leer las revistas de la tienda sin siquiera tener que pagar por ellas.

¿Qué tiene que ver todo esto con la delincuencia? Bueno, cuatro ojos hacen más que dos y seis más que cuatro. El hecho de que los taxistas estén dentro y fuera de la tienda, indirectamente la protege, ya que los delincuentes no se van a meter donde tienen mayor posibilidad de que los descubran o atrapen. Un cajero solitario es fácil de amedrentar y controlar, pero una decena de personas, dentro y fuera de la tienda, no.

Y las cifras así lo confirman. Los negocios que se sumaron a la iniciativa, disminuyeron de 18 robos a mano armada anuales, a cuatro. Mientras que aquellos que no se adhirieron, aumentaron entre siete y nueve robos respecto al año 2013. En total, el número de hurtos se redujo en un 48% promedio el 2014.

Los dueños de las tiendas de conveniencia están felices, dicen que el personal de medianoche lo valora de forma especial, además de sentirse acompañados. Por su parte, los taxistas también están conformes con la medida, porque tienen un lugar donde descansar y encontrarse sin problemas. En cuanto a los ladrones, bueno... esos nadie sabe cómo se sienten, ya que ahora se ven menos por las calles.