¿Te gustaría leer un libro a una velocidad extraordinaria y a la vez recordar todo lo que dice?, ¿o hacer cálculos matemáticos que parecieran imposibles?. Las personas savant pueden hacerlo.
El síndrome savant o "síndrome del sabio" es una condición humana que no ha encontrado explicación científica exacta en cuanto a su origen, pero que de todas maneras se encuentra presente en diversos humanos, y le entrega capacidades extraordinarias a las personas que lo poseen. El Doctor Langdon Down, el mismo que le dio el nombre al síndrome de Down, fue el primero en reconocer el síndrome savant, nombrándolo “savant idiota”, debido a que el termino denotaba a una persona con una capacidad extraordinaria para memorizar, pero que presentaba grandes defectos a la hora de razonar. Savant deriva del término francés savoir, que significa "saber".
Darold Treffert, psiquiatra de la universidad de Wisconsin, se ha dedicado ha investigar el origen de este peculiar síndrome, y a pesar de que no da una clara explicación de cómo se gesta esta condición, estima que de cada diez personas con autismo en el mundo, una de ellas manifiesta el síndrome savant en algún grado. Y la segunda, que el 50% de las personas savant padecen de alguna clase de autismo, mientras que resto sufre de otras discapacidades. De hecho, no necesariamente se nace con el síndrome savant, también puede darse como resultado de algún tipo de daño cerebral producto de enfermedades o accidentes (solo hay 30 casos documentados en el mundo).
A grandes rasgos, los savant se agrupan cuatro grandes áreas de habilidades: la primera es que tienen asombrosas cualidades musicales. La segunda es que tienen facilidad para memorizar fechas y eventos. Tercero, pueden efectuar complejas operaciones matemáticas. Y cuarto, pueden memorizar mapas y paisajes a la perfección, además de medir distancias con una exactitud casi perfecta.
En el mundo existen muchos casos de gente savant, pero hay ciertos casos que han ganado más notoriedad pública, debido a las impresionantes proezas que pueden logar sus poseedores.
Estos hermanos, que poseían ambos el síndrome, saltaron a la fama cuando las personas a su alrededor, comenzaron a darse cuenta de que ellos tenían la asombrosa capacidad de recordar todo lo que había sucedido, a lo largo de cada día de sus vidas, desde sus nacimientos.
También tenían la capacidad de determinar con exactitud qué día de la semana caía cualquier fecha que les dieran, por ejemplo, ¿que día fue el 20 de enero de 1856?. Ellos podían incluso calcular fechas que iban hasta cuarenta mil años atrás.
Como si fuera poco, eran capaces de realizar operaciones matemáticas ultra complicadas o encontrar cifras de números primos. Una característica que compartían ambos, es que los dos gemelos sufrían del síndrome Asperger.
Hay mucha gente que tiene dificultad aprendiendo a tocar la guitarra o el acordeón, pero para el savant Tony DeBlois, eso es pan comido. El estadounidense nació y al poco tiempo después quedó ciego debido a una negligencia medica. Aparte de quedar ciego, DeBlois desarrollo un autismo severo además de la incapacidad de crecer y desarrollarse normalmente, como el resto de las personas de su edad.
Pareciera que todo fuera malas noticias para Tony, pero él logro torcerle la mano al destino. A los dos años de edad se sentó en su piano y comenzó a interpretar a la perfección una canción que escuchaba en ese momento.
La capacidad musical de el joven savant se tornó visiblemente extraordinaria, ya que aprendió a tocar mas de veinte instrumentos y memorizó cerca de ocho mil composiciones musicales. Lo extraordinario es que todo esto lo aprendió sin tener la capacidad de leer partituras musicales, es decir, todo lo aprendió de oído, sumado a su gran habilidad para memorizar piezas musicales.
Este es quizás uno de los savant más famosos de la historia, ya que se hizo una película, Rain Man, inspirada en su vida. Peek nació con macrocefalia, una extraña malformación que hace que las personas tengan una cabeza mucho mas grande que el resto.
Las habilidades sobre humanas de Kim, comenzaron a aflorar cuando las personas de alrededor suyo se percataron de que él podía leer libros a gran velocidad. Leía una hoja con su ojo izquierdo y la otra hoja con su ojo derecho, es decir, leía dos hojas en tan solo ocho segundos. El estadounidense, oriundo de la ciudad de Salt Lake City, leyó cerca de doce mil libros, y podía recordar el 98% de todo el contenido al interior de estos textos.
Otra característica impactante de Peek es que podía recordar todos los mapas de Estados Unidos, pudiendo explicar exactamente, como llegar de una ciudad a otra. Es decir, se convirtió en una especie de GPS humano.
La mayoría de los casos conocidos de savant, son de personas que nacen con el síndrome, pero hay un caso que llama mucho la atención. Jason Padgett fue golpeado en su cabeza a la edad de treinta años, y al despertar se dio cuenta de que había adquirido habilidades matemáticas extraordinarias. Padgett puede ver todas las cosas en base a estructuras de patrones geométricos que, a la vez, puede dibujar e interpretar.
El síndrome savant es un área de estudio apasionante, ya que si logramos entender bien su origen, podríamos llegar a entender como estas personas desarrollan esas capacidades sobrehumanas, y quien sabe, quizás algún día generar la oportunidad de que todas las personas gocen de la capacidad mental que portan estos individuos.