En mi opinión, luego de la rueda y quizá la penicilina, es el sarcasmo nuestra más importante creación.
¿Se imaginan vivir sin sarcasmos? Sería como estar atrapado en el Canal del Senado por toda la eternidad. Todo sería literal, no habría doble sentidos y más terrible: no habría hueveo.
Investigadores coinciden en ello: el sarcasmo cumple una función social y emocional importante. En la práctica, permite "suavizar" nuestros comentarios. O sea, una crítica sarcástica se percibe menos negativamente que una crítica literal.
Ahora, si hablamos de sarcasmos en correos o mensajes de texto, ya es otra liga. Más de alguna relación se habrá dañado por el tardío entendimiento de que el tono de voz, la sonrisa socarrona y el rodaje de ojos no se transmiten de forma digital.
¿Cómo, entonces, podemos regodearnos en sarcasmos, quizá el mayor arte lingüístico humano, en correos y whatsapp sin arriesgarnos a quedar como completos pelmazos? Aquí la respuesta de la ciencia.
Psicólogos y lingüistas de la Universidad de Nottingham, en Inglaterra, realizaron un estudio con el objetivo de evaluar "la influencia de recursos textuales (emoticonos y signos de puntuación) en la comprensión de elogios y críticas sarcásticas vs. literales".
Para ello, realizaron dos experimentos con 200 estudiantes de pregrado mediante una plataforma en línea. En el primero se buscó investigar la comprensión de sarcasmos textuales sin ambigüedad, es decir, que contaban con contexto.
Para ello se explicaba que, por ejemplo, Juanita notaba que María había aumentado de peso, y luego se mostraba un mensaje obviamente sarcástico, de Juanita a María diciéndole "Parece que la dieta está funcionando" o uno literal no sarcástico, como "Parece que la dieta no está funcionando". Los mensajes iban acompañados de un emoticono haciendo un guiño ;-) o sacando la lengua :-P, puntos suspensivos, signos de exclamación o punto final.
Quienes participaban, debían evaluar estos mensaje según nivel de ironía (de nada irónico a muy irónico) y cómo pensaban que el receptor del mensaje se sentiría (de muy negativo a muy positivo).
Los resultados de este primer experimento fueron que, tanto emoticonos como puntos suspensivos, aumentaban el nivel de sarcasmo percibido comparado con el punto final, pero sólo en los casos literales. En los mensajes donde el sarcasmo era explícito (gracias al contexto dado) no tuvieron mayor efecto, dándoles a entender que donde ya existe sarcasmo evidente, no es necesario hacerlo más obvio mediante recursos textuales.
El estudio se ponía más interesante en el segundo experimento, porque repetían el ejercicio, pero sin mencionar el contexto del texto mostrado, y también quitando el emoticono de la lengua (porque sus efectos eran similares al del guiño) y los signos de exclamación (porque no tuvieron efecto alguno en el primer experimento).
El tipo de comentarios ambiguos eran literalmente positivos ("Lo encontré súper interesante") como negativos ("Lo encontré súper fome"), y eran acompañados al final de un emoticono con un guiño, puntos suspensivos o punto final. Nuevamente, los participantes tenían que evaluar el nivel de ironía del mensaje y el impacto positivo o negativo en el receptor.
El estudio encontró que era el guiño el que aumentaba más la percepción de sarcasmo en un mensaje, tanto positivo como negativo, siendo el punto final el recurso que menos permitía intuir sarcasmo. Los puntos suspensivos se ubicaron entre ambos.
Por otra parte, en aquellos mensajes percibidos como sarcásticos, el uso de guiños y puntos suspensivos no suavizó el impacto de mensajes negativos, aunque si ayudó a aumentar la valoración positiva de un elogio expresado sarcásticamente. O sea, una frase sarcástica positiva como "Eres súper fea" (a alguien que claramente no lo es) tiene un mayor efecto positivo si es acompañada por un ;-).
En caso que te hayas mareado un poco con todo lo anterior, las conclusiones del estudio respecto a cuándo usar caritas y símbolos de puntuación y exclamación para denotar sarcasmo, es el siguiente:
1) Si el contexto es claro y el sarcasmo es evidente, el uso tanto de signos de puntuación como de emoticonos es innecesario, pues no influirá en su percepción.
2) Por el contrario, agregar este tipo de símbolos o signos cuando no hay una intención sarcástica, sino que queremos comunicar algo literalmente, no es recomendable, ya que el uso de ;-) y similares, aumenta la "percepción sarcástica", o sea, facilita la confusión de que se entienda como sarcasmo cuando no lo es.
3) En caso de que la situación sea más ambigua, es el emoticono ;-) el más efectivo de los recursos textuales estudiados para hacerle notar al receptor del mensaje que se trata de un sarcasmo. Al mismo tiempo, permite aumentar la percepción positiva de un elogio sarcástico (¡tomen nota usuarios de Tinder!),no así las críticas sarcásticas, que se perciben un poco peor.
Obviamente todo lo anterior aún te obliga a poner atención al contexto y el flujo de la conversación, para ponerte en el lugar del receptor y saber qué tan claro o no es el contexto de tu comentario para él o ella. Pero si eso ya lo lograste, estás al otro lado.
Si aún así nadie te entiende, quizá sea mejor volver a las bases y leer este artículo sobre cómo ser sarcástico en 7 pasos (¡con fotos!).