Ya no es sorpresa que las elecciones sorprendan al mundo y que den vuelta encuestas y dejen en ridículo las proyecciones de analistas políticos expertos. Sólo el año pasado vivimos tres episodios que dejaron atrás toda posible especulación frente a un importante resultado electoral: ganó el NO en Colombia, el Brexit en Reino Unido y Trump en Estados Unidos.

Si bien el mundo y los medios de comunicación demuestran a diario que las sociedades están abriendo sus mentes, que las minorías tienen mayor cabida y derechos, que existe más tolerancia hacia la diversidad, mayor conciencia de los conflictos mundiales y más empatía con las personas que sufren; las últimas elecciones han demostrado que muchas personas están prefiriendo los discursos ultra nacionalistas, que, de una u otra forma, dejan de lado o perjudican la tesis primera de inclusión y tolerancia.

Este año, las elecciones presidenciales de Francia (23 de abril y 7 de mayo, primera y segunda vuelta), podrían convertirse en un hecho más para incluir en el listado de sorpresas en el que triunfa la extrema derecha. Por primera vez, en mucho tiempo, los dos partidos más grandes del país, el republicano y el socialista, no están marcando la preferencia de votos por la diferencia, y han estado inmersos en escándalos y peleas internas entre candidatos y miembros de los partidos.

El que va liderando es el Frente Nacional, partido de ultraderecha con un 27% de intención de votos. Así su candidata, la abogada Marine Le Pen, es quien podría convertirse en la próxima presidenta de la república francesa. ¿Por qué?

Por un lado, ya está casi asegurada la presencia de Le Pen en la segunda vuelta en la que sólo compiten los dos candidatos que obtengan la mayoría en las elecciones de abril, porque los posibles candidatos que le harían la pelea, Francois Fillon y Emmanuel Macron, han ido debilitándose en el camino. Fillon, el republicano y ex Primer Ministro de Sarkozy, fue denunciado por su propio partido de emplear ilegalmente a su familia (Caso Penélope); y Macron, tras separarse del PS del actual presidente Hollande para situarse más al centro, se quedó sin apoyo directo para gobernar, lo que le ha restado peso, ya que además es un personaje político relativamente nuevo y joven (39 años). Por esto del 20% de la intención de votos a su favor, sólo el 33% dice que su intención es definitiva, vs al 73% que dice estar decidido a votar por Le Pen.

Por otro lado, Le Pen tiene más posibilidades porque también ha moderado el discurso racista de su padre (Jean-Marie Le Pen, candidato finalista a las elecciones de 2002), promoviendo un nacionalismo progresista.

Bueno, ¿pero quién es Marine Le Pen? ¿Cuál es su historia? ¿Qué defiende y qué busca hacer en Francia? Aquí les contamos más sobre este personaje que está dando mucho que hablar.

Decidida y de posturas extremas

Marine Le Pen es una abogada de 48 años. Es presidenta del partido nacionalista de ultraderecha Frente Nacional (FN) desde el 2011, tras relevar a su fundador, su padre Jean-Marie Le Pen (conocido por sus posturas racistas y por oponerse fuertemente a la Unión Europea), quien años más tarde fue expulsado del partido, por diferencias importantes en temas políticos.

Así es, apoyó la desvinculación de su propio padre del partido. Pero no es la primera vez que Marine toma decisiones drásticas contra miembros de su familia. Entre los 17 y los 27 años le quitó la palabra a su madre, Pierrette Lalanne, por haberse ido de la casa con otro hombre y por haber aparecido desnuda en la revista Playboy. Y hoy, tampoco le habla a su hermana mayor, Marie-Caroline, por haber apoyado a Bruno Mégret, un disidente del FN. Una mujer de armas tomar, sin duda. Con respecto a su vida personal, se ha divorciado dos veces, tiene tres hijos y hoy está casada con Louis Aliot, vicepresidente del FN, pero indaguemos en sus convicciones.

En discursos políticos, es tajante y dura, por lo que más del 50% de los políticos la consideran un peligro, según La Vanguardia. Por ejemplo, el 2010 dijo que “hace unos 15 años fue el velo, luego vino la burka, y ahora, las oraciones de los musulmanes en la calle”, a las que equiparó también con la ocupación nazi durante la II Guerra Mundial en Francia. Este comentario provocó que el Parlamento Europeo abriera una investigación y le retirase la inmunidad parlamentaria por un eventual delito de incitación al odio.

Por otro lado, equiparó la globalización con el yihadismo, diciendo que "han construido una ideología, el mundialismo económico que rechaza todas las regulaciones y arrebata a la nación sus elementos constitutivos, permitiendo que nazca y crezca otro mundialismo, el fundamentalismo islámico".

Fue candidata presidencial el año 2012, logrando el tercer lugar con un 18,1%, votación histórica para el partido. Desde julio de 2004 es diputada del Parlamento Europeo, y desde el 2010 es consejera regional de la región francesaNorte-Paso de Calais.

Su éxito se debe a que se ha mostrado bastante menos extremista y xenófoba que su padre, y que ha expulsado a los neonazis y extremistas del partido. Además, en su discurso se dirige a quienes se sienten víctimas de la globalización, abandonados por los políticos y amenazados por los migrantes, por lo que exigen mayor control en las fronteras y restricciones en las políticas migratorias.

Es decir, un discurso bastante similar al que hizo que Trump ganara las elecciones en Estados Unidos, y que estaría marcado por el atentado que vivió de niña, cuando en 1976, una carga de cinco kilos de dinamita estalló en su casa. Varios medios ya la llaman “la versión francesa de Trump” y ella misma dijo que Trump se había inspirado en sus propuestas.

Una de sus promesas estrella es la de acabar con la nacionalidad francesa para personas nacidas en el país, y dejarla exclusivamente para quienes la heredan o a quienes se les otorga por gracia, además de retirar a Francia de la Unión Europea, entre otras controvertidas posturas.

Sus propuestas y posiciones políticas

Marine Le Pen señaló que el objetivo de su programa es, antes de todo, devolver a Francia su libertad y dar la voz a la gente. Dentro de sus posturas políticas, encontramos lo siguiente:

Seguridad nacional:

- Subir el presupuesto militar a un 2%

– Prohibir constitucionalmente el comunismo

– Nuevas prisiones, para un total de 40.000 nuevos presidarios

– Reinstaurar la pena de muerte

– Reinstaurar la cadena perpetua no reversible

– Endurecimiento de las penas, especialmente por aquellos delitos contra policías

– Militarización de la policía nacional

– Eliminación del carnet de conducir por puntos y sanciones directamente por el Código Penal

– Incrementar las pensiones de los veteranos de guerra.

– Hacer de la Constitución Francesa la Ley Suprema, incluso por encima de los Tratados Internacionales

Migración:

– Reducir la inmigración de 200.000 a 10.000 al año, y expulsar a todos los inmigrantes ilegales

– Eliminación de la reunificación familiar, para que los extranjeros no puedan traer a sus familias

– Reducción del otorgamiento de asilo

– Cierre de las fronteras, salida del acuerdo Schengen

Economía:

– Abandonar la Unión Europea y el Euro

– Abandonar el libre comercio en la UE e instaurar los derechos de aduana

– Prohibir la “discriminación positiva”

- Obligar a todas las empresas a contratar primero a un francés antes que a un extranjero

- Prohibirá la importación de productos foráneos que no cumplan las medidas impuestas a los franceses

- Rebajar la edad de jubilación e incrementar varios beneficios del estado de bienestar, al tiempo que rebaja la carga tributaria a las pequeñas empresas y el impuesto de la renta

Políticas sociales:

– Vivienda social solo para los franceses

– Prohibición del aborto

– Revocar el matrimonio homosexual

– Adopciones solo para heterosexuales

– Salud solo para franceses

- Quitar el derecho a educación a los hijos de migrantes que se mantienen ilegales

Terrorismo:

- Se cerrarán las mezquitas extremistas

- Se prohibirá la financiación pública de los lugares de culto

- Los extranjeros fundamentalistas fichados por la policía serán expulsados de inmediato

¿Crees que Le Pen podría ganar la presidencia?