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Algunos dicen que los millennials, nacidos entre 1977 y 1995 aproximadamente (los años no están bien definidos), son poco comprometidos con su trabajo, que trabajan un par de años y después se quieren ir a recorrer el mundo.
Bueno, la verdad es que las cosas han cambiado y seguramente los adultos que trabajan con millennials han tenido uno que otro problemilla, porque no entienden su mentalidad “libre” ni su manera de ver el trabajo, por eso en El Definido los queremos ayudar a saber cómo piensa esta generación poco comprendida a veces, pero que tiene un gran futuro y responsabilidad por delante.
El próximo año serán mayoría, representarán más del 50% de la fuerza de trabajo en el mundo. Así que las empresas exitosas del futuro, van a ser aquellas que logren entender a esta generación y adaptar su enfoque de reclutamiento, retención y productividad en torno a ellos.
Primero, algunas claves para familiarizarse con las actitudes de tus empleados o compañeros de trabajo millennials:
- La flexibilidad es una prioridad
¡Se nota que no están acostumbrados a tener horarios!
Según un estudio de la Universidad de Bentley, el 77% de los millennials asegura que tener un horario de trabajo más flexible, haría que fueran más productivos.
Prefieren acomodar su horario laboral, de acuerdo con sus metas personales y familiares. No están dispuestos a sacrificar sus actividades, pero no por flojos, sino por querer compatibilizar ambas cosas. De hecho, trabajan tan duro como el resto, pero miden la productividad por el trabajo realizado, no por el tiempo que le dedican a una tarea.
- Aman viajar
Las prioridades de los jóvenes han cambiado. En mi época uno empezaba a trabajar apenas salía de la universidad, ahorraba, se casaba y tenía hijos.
Hoy tomar un avión y conocer otros países es mucho más fácil y barato que antes, por eso las generaciones anteriores no entienden que estos jóvenes quieran “mandarse a cambiar”.
Pero los millennials prefieren gastar su dinero en un viaje, antes que comprarse una casa, por ejemplo. La vida es demasiado corta como para desaprovechar las oportunidades de conocer otros países, culturas y vivir nuevas experiencias, ¿o no?
Así que si tu empleado o compañero de trabajo te dice que renuncia porque se va a recorrer el mundo, entiéndelo. Probablemente tú habrías hecho lo mismo si hubieses podido. Y si tienes la oportunidad de guardarle el puesto hasta que vuelva, también podría ser una buena idea: el aprendizaje de ese viaje puede ser valioso para la empresa.
- No son amigos de las estructuras jerárquicas
¡Qué tipos más confianzudos!
Si no tratan a sus jefes de usted o no sienten ese temor reverencial que vemos en las películas, no es por mal educados. Simplemente no son amigos de las estructuras, se sienten más cómodos y productivos en un ambiente de trabajo más informal y no tan estructurado.
Prefieren una estructura de poder más horizontal, donde todos sean escuchados y puedan acceder fácilmente a sus superiores. Para ellos también es importante tener la posibilidad de asumir desafíos y crecer desde el principio. En realidad lo que buscan con esto es tener espacios de colaboración dentro de sus trabajos, donde puedan aprender de quienes tienen más experiencia y así crecer como profesionales. Los millennials prefieren evitar los ambientes de trabajo competitivos.
- Están en búsqueda de un propósito
Estos jóvenes renuncian a su trabajo como si nada, no saben comprometerse con algo.
Hemos escuchado que los millennials pueden ser egoístas e individualistas. Sin embargo, muchos de ellos no tienen problemas en dejar sus trabajos bien pagados, para cambiarse a un trabajo significativo donde puedan ser un aporte en la sociedad.
Sí, cambian de trabajo con frecuencia y no se complican con renunciar si no están felices en lo que hacen, pero, ¿no está bien si en realidad cuando una empresa (generalmente las grandes) decide entregarle el sobre azul a su empleado, tampoco se complica tanto?
No tienen miedo a romper normas y ser ellos mismos. Se caracterizan por ser honestos y valientes como para desafiar el status quo y hablar sin temor sobre los errores de la sociedad.
Son todas estas cosas las que están haciendo que el trabajo cambie lentamente, para adaptarse a los millennials, hacia una cultura de trabajo más sana, abierta y flexible. Y no solo los trabajos, la sociedad también evoluciona. Ahora, ¿qué pueden aportar? ¿Cómo trabajar con ellos?
Jason Dorsey, experto en el tema y conocido como "The Gen Y Guy" ("El tipo del gen Y") asegura que es esta generación la que hace que la magia suceda en el trabajo, ¿Por qué?
- La mayoría quiere lograr un impacto desde su primer día en el trabajo. Es esta actitud de querer marcar una diferencia, la que tiene mucho potencial.
- Naturalmente retan lo que es normal, se enfrentan al código establecido. Eso es tierra fértil para la innovación, que es la clave para cualquier iniciativa en un mercado cada vez más competitivo. Si no hay diversidad de pensamiento, es difícil que haya innovación, por lo que es una riqueza que se cuestionen los esquemas.
- Prefieren tener un sueldo más bajo a cambio de trabajar en algo en lo que creen y que les divierte. Por eso los Millenials ven su trabajo como un estilo de vida y no como un tema aislado, lo que empodera su capacidad de aportar en la construcción de objetivos
Conocerlos no basta del todo para entenderlos, y sabiendo ya los aportes positivos de los millennials en las empresas, el paso que queda es aprender a trabajar con ellos a pesar de las diferencias.
Es importante que tus empleados tengan muy claro qué es lo que están haciendo, esto ayudará al éxito de la empresa.
“Con demasiada frecuencia, los ejecutivos piensan que los trabajadores jóvenes en puestos de primer año no necesitan ver el panorama general, pero para los millennials, esto a menudo es clave para la motivación y el enfoque. Quieren sentir un sentido de conexión con su empresa: comprender lo que hace la empresa, gustar y creer en sus servicios o productos”, explica Erika Andersen, autora del libro Desarrollar Empleados Extraordinarios.
Pregúntales qué ideas tienen y qué opinan sobre ciertos temas relacionados con la empresa. No es una idea loca ni descabellada, si no sueles a hacerlo, puede que sea la hora de comenzar y no solo con tus empleados millennials. Esto hará que se sientan valorados y que puedan contribuir a la misión de la organización.
Los millennials tienen mucho potencial y no es la idea perderlo, por eso quizás sería bueno analizar la opción de dejar que tus empleados tengan más flexibilidad horaria y que no estén obligados a trabajar tiempo completo en la oficina, lo que no significa por ningún motivo, bajar la exigencia ni el nivel de trabajo.
Ellos están muy abiertos a recibir una retroalimentación sobre su trabajo y prefieren que esta sea clara y específica, sin rodeos. Esto los ayudará a mejorar en lo que están más débiles y a saber qué es lo que están haciendo bien.
Como te contamos, los millennials buscan poder acceder fácilmente a sus jefes no por patudez, sino porque tienen ganas de aprender de ellos, los ven como líderes que los puedan guiar. Además, buscan personas con las que puedan tener la confianza suficiente para preguntar y sentirse apoyados.