El hecho de que en Chile haya 3.888.431 personas en el actual registro de no donantes, según el Registro Civil, y que desde el 2010 el porcentaje de quienes se unían a la hora de renovar su cédula de identidad o licencia de conducir fuera en aumento (de los cuales varios decían no recordar haber sido consultado si quiera al respecto), provocó una modificación a la Ley del Donante Universal. Uno de los principales cambios es que ya no se pedirá tomar esta determinación al momento de realizar estos trámites, ya que al ser circunstancias tan ajenas a la naturaleza de la decisión, la gente no respondía en consciencia. ¿Entonces qué?
Se estableció que, automáticamente, todos los mayores de 18 años ahora son donantes ¿Lo más polémico? Que si no se quiere ser donante habrá que firmar ante notario un documento para testificarlo y que ese trámite, tiene un costo económico.
Sin embargo, prácticamente sólo se ha hablado de esos dos puntos, mientras hay un montón de preguntas dando vueltas respecto a la modificación de la ley. Acá te las presentamos con sus respectivas respuestas, en simple y claro.
¿Quién es donante de órganos según la nueva ley?
Automáticamente, toda persona mayor de 18 años una vez fallecida.
¿Hay excepciones?
Sí. Las personas que sean portadoras de VIH, quienes tengan infecciones graves no controladas o cáncer con metástasis.
¿Se me preguntará si quiero ser donante al sacar la licencia o renovar el cédula de identidad?
No.
¿Quiénes son los potenciales donantes de órganos ahora?
Cerca de 10 millones de chilenos, que tienen mayoría de edad y que no han manifestado, en los últimos tres años, una voluntad contraria a la donación de sus órganos.
¿Quiénes son no donantes?
Las personas que en vida hayan firmado una documentación fidedigna, otorgada ante notario público, en la que manifiesten su voluntad de no ser donante.
¿Qué pasará con los que ya están inscritos como no donantes?
Quienes hoy estén en el registro de no donantes, se mantendrán en dicho registro hasta que renueven su cédula de identidad. Cuando eso ocurra, si desean mantenerse como no donantes, deberán hacer el trámite notarial para ratificar su decisión. De lo contrario, pasarán a ser donantes.
¿Qué hay que hacer con ese documento notarial?
El notario deberá remitir esa información al Servicio de Registro Civil e Identificación, que deberá incorporar a la persona al Registro Nacional de No Donantes.
¿Qué tipos de documentados califican como válidos para formalizar la negativa?
La firma de una escritura pública, un documento protocolizado o una declaración jurada simple.
¿Cuánto cuestan estos trámites en una notaría?
La firma de una escritura pública o un documento protocolizado van desde los $5.900 a los $8.400. Una declaración jurada simple oscila entre los $500 y los $800.
¿Qué pasa si el fallecido no firmó este documento, pero su familia dice que no quería ser donante?
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, aseguró que en estos casos, lo que dice la familia será respetado.
¿Y si hay dudas sobre si el fallecido es donante?
Se consultará a determinadas personas en el siguiente orden:
- Cónyuge o persona que convivía con el fallecido en relación tipo conyugal.
- Cualquiera de los hijos mayores de 18 años.
- Cualquiera de los padres.
- El representante legal, el tutor o el curador.
- Cualquiera de los hermanos mayores de 18 años.
- Cualquiera de los nietos mayores de 18 años.
- Cualquiera de los abuelos.
- Cualquier pariente consanguíneo hasta el cuarto grado inclusive.
- Cualquier pariente por afinidad hasta el segundo grado inclusive.
¿Qué se entiende por "dudas" sobre su opción?
La ley califica como dudas fundadas cuando se presentan documentos contradictorios al médico tratante o si hay falta de acuerdo entre los familiares.
¿Quién puede recibir un órgano?
Cualquier persona cuyo estado de salud lo requiera tiene derecho a recibir un órgano.
¿Existe un tipo de prioridad cuando hay personas en igualdad de condiciones?
Sí. Se priorizará a quienes hayan optado por ser donantes sobre aquellos que no lo sean.
¿Qué órganos se pueden donar?
El corazón, pulmón, hígado, riñones, páncreas, córneas, válvulas cardíacas, huesos y piel.
¿Cuándo se hace efectiva la donación de órganos?
Cuando se acredite la muerte encefálica por dos médicos cirujanos distintos a los que realizan el trasplante.
¿Qué es la muerte cerebral?
Pérdida total e irreversible de todas las funciones del cerebro. Se pierde la capacidad de respirar y el cuerpo de la persona sólo puede ser mantenido en forma artificial por algunas horas.
¿Qué pasa si la persona murió como consecuencia de un delito?
Quien debe autorizar la extracción de órganos es el fiscal, previa consulta al Servicio Médico Legal.
¿Los familiares pueden conocer el nombre de quien recibe los órganos?
No. La donación debe ser totalmente anónima.
¿Se puede ser donante en vida?
Sí, pero el trasplante sólo puede realizarse entre personas relacionadas (pariente consanguíneos, pariente por adopción hasta el cuarto grado y convivientes). El donante debe ser mayor de edad y capaz legalmente, además de conocer los riesgos de la intervención y la extracción del órgano no debe causar un perjuicio grave a la salud del donante.
¿Si soy no donante y ahora quiero serlo, qué tengo que hacer?
Sacar nuevamente su cédula de identidad (y quedar en el Registro Civil como donante universal mayor de 18 años) o acudir a una notaría y explicitar su voluntad.
¿Cuál debiera ser el impacto de esta ley?
Disminuir de tres millones de personas que figuran en la lista de No Donantes, a aproximadamente un millón y medio.
¿De dónde sale esta cifra?
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, aseguró que cuentan con una muestra representativa que dicha cantidad de personas sí desearían ser donantes, pero que en su momento no tomaron conciencia de lo que se les estaba preguntando.
Independiente de la modificación a esta ley, el paso a seguir para varios profesionales relacionados al ámbito de la salud, es implementar políticas que clarifiquen e informen sobre la importancia que tiene donar órganos. A pesar de que la mayoría de las personas tiene una idea respecto al tema, no existe una política activa que entregue herramientas para tomar la decisión de si ser o no donante, con la mayor conciencia posible. ¿Tú qué opinas?