Imagen: Takeshi Kuboki / Flickr

La música docta sí es para todos

El lector Felipe Undurraga tiene algunas teorías de por qué a la mayoría de las personas no les atrae la música clásica y cómo podemos volver a re encantarnos con ella.

Por Otros Medios | 2014-03-17 | 23:30
Tags | música docta, clásica, sinfonías, clásicos

- A quién le gusta la música??!!!

- A miiii!!!!! - gritan todos

- Y la música docta???!!!!

- …    (cri - cri)

Una vez oí que solo a un 3% de la población mundial le gusta la música docta. Con este dato quiero hacer un par de comentarios.

¿Quién sabe de música docta? Sus abuelos, el viejo pesado y fome del departamento de abajo que siempre pide que metamos menos ruido, esa tía que tocaba piano cuando chica y quizás en el colegio había un par de compañeros, que como sus papás escuchaban esa música, a ellos les gustó y aprendieron. Ahora…

¿Por qué al común de la gente no le gusta la música docta? 

Yo tengo algunas teorías:

Lo primero es su estigmatizaciónse piensa que es música para viejos-pitucos-seniles-conservadores-antimodernidad-antiruido-faltos de alegría, una mezcla entre el dueño del banco de Mary Poppins y Gargamel, es decir la música docta tiene como sinónimo a la naftalina.

Segundo, el (la) profesor(a) de música en el colegio, si es mujer es esa miss mundo que hace que te guste todo tipo de música o es la vieja bruja con verruga que te obliga a escuchar otros viejos con pelucas muy fomes. 

En cambio si es hombre, generalmente es medio huequereque y temperamental, que además te hace cantar como ópera cuando tienes 13 años, siendo que a esa edad quieres cantar como Marilyn Manson. Seamos francos, cuando estás en el colegio cualquier cosa que te hagan hacer por “obligación” pasa inmediatamente al cajón de lo “odiado por el resto de la vida”.

Tercero, si prendes la radio es casi imposible encontrar música docta, así que escuchas cualquier radio y pones scan hasta que aparece alguna canción o grupo que te gusta. Si por esas casualidades de la vida te topaste con la radio Beethoven, aparece un señor de voz profunda anunciando una Sinfonía en SI MI SOL Bemol Mayor Op. 1492 de Ighor Tkashtankatka, 3° Movimiento, Allegro ma Nontroppo, solo con el nombre de la obra ya te dio lata y es difícil por lo que lo más seguro es que la cambies. 

Otra opción es que no escuchas radio porque tienes la música que te gusta en tu Iphone, Smartphone o similar y no necesitas más.

Y si nunca has escuchado buena música docta o nunca te enseñaron, ¿cómo la vas a conocer o cómo te va gustar? y ¿Qué pasa si te digo que…


Siempre has escuchado música docta y no te has dado cuenta.

Y eso no es todo, te encanta. Aunque no lo creas es verdad, cada teleserie, reallity o película, tienen extractos de música docta, hay comerciales con música docta, reportajes en las noticias, canciones populares, está lleno de música docta incluso en los dibujos animados, pero no nos damos cuenta porque está como un adorno, como música incidental. 

Es aquí donde quiero detenerme un momento, ya que la música incidental si le gusta a todos (o casi todos). Una buena música incidental puede hacer que una película sea un éxito o un fracaso. Imagínense ver Avatar o Gladiador con música de fondo de Wendy Zulca o la Tigresa del Oriente, creo que ya entienden el resultado.

A esto apunta este artículo, soy un convencido que no es necesario saber de música para disfrutarla, no es necesario saber de teoría, contrapunto o armonía para entender la música, sólo es necesario imaginarse que quiere decir, que quiere transmitir, que imagen, que emoción, que personajes o simplemente que parecido tiene a que o cual cosa. 

Si te fijas en esos puntos, como lo hizo Disney en Fantasía, te encantarás con la música docta, o sea “ve” la música docta como música incidental, imagina una escena de película, de teleserie o lo que sea que te imagines y verás como la música cobra sentido, verás como la música te habla.  

Hagamos un experimento: Imagina un cisne en una laguna, ese cisne ya está viejo o medio enfermo, está moribundo pero mantiene la elegancia característica de los cisnes al nadar. Trata de aletear para volar, pero no le dan las fuerzas, nada, aletea, elegante, moribundo, finalmente se tiende en la orilla y muere tranquilamente. Oigan el siguiente link y díganme si esta música concuerda con esa imagen.

Sobre esto, con ejemplos claros, algunos datos, tips o un par explicaciones, es que quisiera en cada artículo ir mostrando o demostrando la gracia y el encanto que tiene la música en todos nosotros y que pasa por alto por todos y quizá algún día ese 3% suba a un 4% por lo menos entre los lectores.