Esta es una de las buenas ideas que partió "sin querer queriendo", porque cuando Verónica y Víctor Hugo tuvieron que hacerse cargo de un almacén para mantener a su familia, no sabían nada del rubro. Era su posibilidad de generar ingresos y con la experiencia comenzaron a entender poco a poco el funcionamiento de las ventas minoristas de barrio.
Ambos se dieron cuenta lo complejo que resulta para los dueños administrar un almacén: llevar las cuentas, controlar la mercadería, identificar qué compran más los clientes, entre otros, y como Víctor Hugo era programador, decidieron crear un software muy sencillo e intuitivo que mejorara considerablemente el orden del negocio y su rendimiento.
Vichito, nombre en honor a su hijo, es una empresa que está ayudando a cientos de almaceneros a llevar adelante sus negocios de manera mucho más eficiente, a través de un sistema que organiza los datos, permitiendo un control claro de las compras y ventas.
"Nuestro principal objetivo es cambiar la visión generalizada del almacén de barrio, transformar el negocio de la esquina en una empresa, mejorando la calidad de vida de sus dueños y liberándolos de lo esclavizante de su trabajo", cuentan en Socialab Verónica Oliva y Víctor Hugo Reyes, sus creadores.
Esta iniciativa es de gran impacto, mal que mal, el "negocio de la esquina" es el alma comercial de la ciudad a pequeña escala y en muchos barrios, los vecinos se proveen en gran parte de todo lo que necesitan a través de estos locales. Actualmente en Chile hay más de 120 mil almacenes de este tipo, según la Confederación del Comercio Detallista y Turismo de Chile (Confedech).
Muchos de ellos fracasan prontamente por la falta de conocimientos en administración de sus dueños, acabando con toda la inversión y esfuerzo de una familia completa. Otros podrían aumentar sus ganancias si se ordenaran de mejor manera: "Las principales carencias están dadas por no controlar los costos, no controlar los inventarios, no gestionar los clientes, ni para qué decir los proveedores, porque está muy asociado al inventario" explica Marco Fuentes, asesor económico Pymes, Consultora E&G.
A través de la tecnología instalada en los almacenes, Vichito ayuda a manejar el negocio, las ventas y saber los precios de los productos, incluyendo datos para el manejo del almacén, inventarios, registro de "fiados" (para los que se quieran arriesgar con ellos), cuentas por pagar y listado de compras de insumos. El software está pensado para personas que no tienen nociones de administración.
Además, el sistema es tan funcional, que lo puede usar cualquier persona sin necesitar conocimientos en tecnología. Tanto, que la mamá de Verónica de 60 años, que nunca había usado un computador, lo manejó en menos de una semana.
"La tecnología es parte del desarrollo humano, no puedes apartarla, no puedes dominarla, no puedes tenerle miedo, es como el ciclo de la vida, es más que nosotros, podríamos decir", comenta Víctor Hugo.
Vichito entrega su software, hardware y asesoría para comenzar, además de asistencia técnica, para mejorar la organización de un almacén, es decir, los equipos necesarios, el programa y ayuda para sacarle el jugo al máximo al sistema.
El kit básico es un computador completo con el lector de códigos de barra, más el programa Vichito Retail. También se puede añadir la impresora técnica que imprime el detalle de la venta, los gabinetes de dinero (caja automática) y cámaras de monitoreo, si el dueño lo requiere.
Desde su desarrollo el año 2003, han logrado llegar a más de 500 clientes en distintos rincones del país, ofreciendo a todo ellos soporte en línea y, en caso de necesidad, en terreno, y actualizaciones de hardware. Un buen porcentaje forman parte de una alianza que hizo Vichito con una importante embotelladora del país y sus clientes minoristas, que distribuye productos en cuatro regiones.
Recientemente, Vichito fue premiado por Socialab por su nuevo proyecto que planea llevar a cabo gracias a la ayuda de esta incubadora. Se trata de Vichito Social POS (Point of Sale) una versión del sistema que busca ampliarse más y generar una relación vinculante con los dueños de almacenes.
Actualmente, instalan el aparataje, capacitan y asisten técnicamente, un servicio completo, pero que quieren extender para generar un mayor impacto social en los barrios. La idea que planean es ofrecer un servicio de permanente asistencia a los dueños de almacenes, que se pague una vez al mes, donde constantemente les ayuden a mejorar su negocio a través de variadas capacitaciones
Hoy en día, muchas veces los almaceneros no llaman por falta de tiempo, porque no saben correctamente el programa, porque se les olvida. Verónica entiende que eso es algo normal, porque ella misma trabaja en el rubro, y muchas veces uno solamente se preocupa de vender. Pero tanto ella como Víctor Hugo creen y están seguros de que Vichito es una herramienta que los puede ayudar a cambiar la vida de los dueños de estos locales y mejorar su utilidad en cada sector de la ciudad.
Además con Vichito Social POS buscan ofrecer un servicio de inteligencia de negocios para las distribuidoras mayoristas interesadas en estudios de mercado. Con toda la información que manejan, facilitarán considerablemente la logística de distribución, ya que las empresas podrán saber con más precisión en qué sectores se consume cada tipo de productos. Hoy en día, a escala de barrio, las compañías se informan a través de encuestas que a menudo son costosas, nos explica Verónica, y no siempre precisas. En cambio, con el software sería posible medir exactamente el nivel de ventas de cada marca y producto.
Verónica y Víctor Hugo sueñan con que ese sistema llegue a la mayor cantidad de gente posible, produciendo un cambio global e el funcionamiento de los negocios locales. Así poder facilitar la vida de todos los que emprenden con este tipo de negocios, de manera que no solo puedan generar más ingresos, sino que generen puestos de trabajo y también transmitan lo aprendido a la vecindad que los rodea.