Imagen: Gojko Franulic

Profesores 2.0: Estrategias para manejar los celulares en clases

Cada año las generaciones están más metidas en todo el ámbito tecnológico, lo que ha traído muchos beneficios, pero también tiene su parte negativa: la poca concentración que logran los jóvenes y niños en sus establecimientos educacionales.

Por Javiera Macaya @ | 2015-06-01 | 06:32
Tags | Profesores, medidas, celulares, estrategias, alumnos, clases, copia

¿Qué te distraía cuando eras estudiante? ¿el segundero del reloj sobre el pizarrón? ¿tu compañero de puesto hasta que les llamaban la atención? ¿las hojas limpias del cuaderno que te tentaban a escribir garabatos? Bueno. Piensa en que hoy día, lo que distrae a los alumnos son los Trending Topics comentados en Twitter por cientos de personas, el video viral de Youtube, el grupo de Whatsapp con 25 integrantes y las nuevas fotos de Instagram de modelos internacionales. El desafío de poner atención en la clase es mucho mayor y el reto para el profesor de lograr mantenerla, es casi imposible.

Ahora, si nos detenemos en los métodos de copia de ayer y hoy, el celular simplificó bastante las cosas. Adiós espejos, torpedos escritos en el antebrazo y hojas con información microscopia escondidas en el estuche. Bienvenido: Señor Google. Si los alumnos le quieren poner un poco de dificultad al cuento, pueden hablar por WhatsApp durante la prueba, intentando que no los descubran.

A mediados de este mes, se dio a conocer el caso de 30 alumnos de la Pontificia Universidad Católica, los que crearon un grupo por WhatsApp llamado “Asado familiar” y fueron sorprendidos copiando a través de la red social, razón por la que arriesgan las sanciones que dicha casa de estudio tiene previsto para este tipo de situaciones.

La copia siempre se ha dado en las salas de clase y con frecuencia. El problema es que ahora es en masa y son los profesores los que están sometidos a prueba cuando los alumnos tienen control. Han sido ellos los que han tenido que utilizar su creatividad para abordar el problema que trajo la generación que nació con el celular en la mano, ya que no existe un ramo o alguna asignatura para enseñar “como evitar el plagio o los celulares en clases”.

Cómo se está abordando el tema

Javiera Sancho, alumna de pedagogía de cuarto año, rescata que al menos los profesores están conscientes del problema, e invitan a los futuros pedagogos a buscar herramientas para usar la tecnología a su favor. Eso es algo que ya se está instalado. Son varios los que utilizan los celulares, proyectores y videos educativos para explicar la materia, así como también cada vez son más chicos los alumnos que se ven con celulares inteligentes en las manos.

El profesor de Ingeniería Comercial de la Universidad de Chile, Nicolás Williams, dice que hay que ir adaptándose a las nuevas generaciones e ir cambiando los métodos: “Una buena forma de evitar el plagio es no realizar pruebas con alternativas. Hacer los exámenes con preguntas de desarrollo, pero con preguntas que los hagan pensar, no con preguntas exactas. También tener más evaluaciones con trabajos, ensayos y presentaciones”.

En El Definido, hablamos con diferentes alumnos universitario que nos contaron algunos métodos que aplican sus docentes para evitar el celular en las salas de clase, algunos menos pedagógicos que otros, pero que pueden intentar “solucionar” este problema. Aquí cinco ejemplos:

  • 1)“Caja, canasto o una mesa”

    Una de las técnicas más utilizada por los profesores, es pedir a los alumnos que al ingresar a la sala dejen sus móviles apagados en una caja, canasto o en la mesa delantera, para evitar que los usen y contarlos, para que ninguno pueda hacerse el “loco”. Es muy simple: El que no lo entrega, no participa de la clase.
  • 2)“Adiós a tu señal”

    Este método es muy utilizado en otros países. Un estudiante chileno que vive en Alemania, Daniel Numi, comenta que cada vez que entra a su sala de clases los profesores cortan la señal de internet para que nadie pueda conectarse, a pesar de que tenga 3G. En algunas universidades del país también se está aplicando esta medida, para evitar cualquier conexión a internet que los distraiga.
  • 3)“Control para todos”

    Una estudiante confesó que un profesor de un ramo optativo, cuando sorprendía a un alumno con algún aparato electrónico, inmediatamente realizaba un control a modo de “castigo”, para todo el curso. La evaluación tenía el nombre de la persona que fue sorprendida con su celular. La lógica aquí es el compañerismo, por supuesto que nadie quiere que todos sus pares tengan que dar una prueba por su culpa.
  • 4)“Carta de compromiso”
  • Esto sólo se aplica para el plagio: Algunos docentes hacen a sus alumnos (la mayoría universitarios), firmar una declaración detrás de la prueba en la cual sale escrito que si son sorprendidos copiando deben aceptar ser expulsados del establecimiento. Con este castigo, a cualquiera le daría miedo intentar mirar para otro lado.
  • 5)“Al suelo

    Algunos universitarios comentaron que tenían una profesora que al sorprender a alguien con un teléfono en la sala, inmediatamente los requisaba y los dejaba en la orilla de la mesa que está adelante. ¿Por qué en la orilla? Si el celular vibraba, se caía instantáneamente al piso.
    También se utiliza hacer pruebas distintas para la fila A y B, distribuir de forma distinta los puestos, prohibir derechamente el uso de celulares, todo siempre acompañado de enseñar la importancia de la verdad, de lo que está bien y mal, del valor que tiene cumplir las reglas.

Nuevo método: incentivar en vez de castigar

A principios de este año se lanzó una aplicación llamada “Pocket Points” creada por la Universidad de California, que busca proponer una nueva manera para evitar que los jóvenes usen sus celulares. La idea de esta es dar recompensas a través de “puntos” que se acumulan por no usar el teléfono en clases. El móvil tiene que estar abierto en la aplicación, y acumula puntos mientras el celular no tiene actividad. El puntaje final se puede canjear en diferentes lugares asociados al establecimiento. La idea es que puedan jugar, ganar, y que los profesores logren entregar su conocimiento al 100%.

Dejando que los niños o adolescentes se den cuenta de que estando en el celular, en vez de aprovechar la clase solo les perjudica a ellos, es una medida poco realista. Se necesita pensar en colectivo la mejor forma de adaptarse a la tecnología, y hacerlo en comunidad. Compartir los casos de éxito y ojalá impartirlos cuando los profesores se forman, para que no tengan que improvisar con ensayo y error cada vez que entran a una sala de clases.

¿Conoces algún método novedoso para evitar este problema?