Vuelven los vinilos made in Chile

A cargo de Oliver Knust, director de Discos Río Bueno, se instalará en nuestro país la segunda planta prensadora en Latinoamérica de este formato. Románticos y hipsters celebran.

Por Antonia Laborde @antonialaborde | 2013-03-22 | 10:06
Tags | vinilos, música, discos, disquerías

Los Prisioneros, Chico Trujillo, Los Jaivas, Gepe y varias otras bandas nacionales ya han sacado sus discos en versión vinilo, para ponerse al día con la onda retro. O atrasarse con la onda moderna, que vendría siendo lo mismo. Sin embargo, todos se han visto obligados a encargar su producción al extranjero, dado que en Chile no existe una planta prensadora de vinilos, al menos hasta ahora.

Oliver Knust, director de Discos Río Bueno, sello independiente que ofrece el servicio de fabricación de vinilos a artistas nacionales, es el hombre que está detrás de la segunda fábrica de este formato de discos en Latinoamérica, siendo Brasil el primero y único hasta el momento.

Cuando Knust llevaba tres años trabajando en el sistema de importación de vinilos, y en base a la información adquirida, se dio cuenta que era rentable traer una maquina prensadora a Chile, por lo que decidió postular a un fondo de la música y, el 2012, ganó el Fondart que pondría en marcha su proyecto.

El costo de pasarse a un sistema (ex)obsoleto

Para un artista chileno, encargar la fabricación de 300 vinilos (lo mínimo) a Estados Unidos, cuesta $1.762.000 hasta que los tiene en la puerta de su casa, con caratula y todo. Los 500 vinilos cuestan $2.720.000 y los mil, $2.990.000 según la información de Discos Río Bueno.

A pesar de que Brasil se encuentra mucho más cerca, sus trabas e impuestos, sumado al transporte, se llevan un tercio del costo total de producción. Es por esto que México, Estados Unidos o República Checa eran la alternativa más económica. Otra alternativa era hacer como Chico Trujillo, que fue personalmente a Alemania a hacer la movidas para que su música se escuchara en el romántico formato análogo.

El costo para los artistas podría bajar este año. Knust encontró en el México profundo una maquina prensadora de discos de vinilo y se la trajo a Chile esperando que entregue el servicio de fabricación más asequible para la región. Sin embargo, faltan algunos detalles para que "salga al aire".

"La máquina llegó en octubre del año pasado, ahora hemos estado tratado de armar todo el tema hidráulico, ya que trabajan con ese sistema, vapor y calor. Por mientras seguimos fabricando en una planta bastante grande en Estados Unidos", dice el director de Discos Río Bueno, quien asegura que le encantaría tener la prensadora funcionado a final de año.

El boom (chiqui-chiqui-boom)

Portaldisc, el mayor portal de descarga legal de música chilena, ofreció a sus usuarios, el 2011, reservar los vinilos de Los Prisioneros antes de su lanzamiento. Tenían 2.000 copias para distribuir... se reservaron todas. Eso confirmó el rumor: Los vinilos habían vuelto y las disqueras tenían que reaccionar.

Por de pronto, Portaldisc sacó VentasOnline.cl, donde ya no sólo se encuentran vinilos de Los Prisioneros, sino de varios otros artistas chilenos que han decidido hacer frente a la demanda popular.

Disqueras como Funtracks, ubicada en Nueva de Lyon, pasaron de tener 500 títulos en vinilo el 2009 a contar con cerca de 4.000 ejemplares. Además venden tocadiscos AT-LP60 sin entrada USB a $90.000 y el mismo modelo con entrada USB a $99.600.

La mismísima Billboard, tras verse afectada por la piratería y la descarga de música por internet, fue cerrando una a una sus disquerías y hoy está solamente ubicada en el paseo Drugstore de Providencia. Si antes se encontraban 5.000 títulos en su local de Providencia, hoy sólo hay una oferta de 400, pero no por falta de clientes, sino porque apostaron a otro modelo, con mucho éxito: el encargo por catálogo.

Todos los miércoles, los clientes pueden elegir de un listado de 500.000 títulos los discos, vinilos, DVD o BlueRay que quieran y en una semana los pueden recoger. El dueño de la disquera, Rafael Abuhadba, cuenta que los jóvenes son los que encargan los vinilos y "los cuarentones" los CD. También venden tocadiscos desde $90.000 hasta $150.000 con entrada USB.

Pero si los vinilos son una moda, ¿quiere decir que va a pasar?

"Espero que el vinilo no muera nunca, puede ser que se estabilice y no siga creciendo, pero yo creo que es algo que se va a mantener, porque es un producto que se relaciona con un periodo muy importante para la música ('60s-'70s). Nunca va a ser una cosa masiva, pero como es música, tiene mucho sentimiento y por eso creo que ha picado de nuevo, se relaciona con nuestro pasado. Tiene mucho de romanticismo y espero que el romanticismo no muera nunca en la historia del hombre", dice Abuahaaba.