Imagen: Rodrigo Avilés

"¿Eres tonto o te haces?" El maltrato infantil que no vemos (y hasta creemos necesario)

#UnNuevoTratoConLaNiñez es la nueva campaña del Consejo Nacional de la Infancia, que busca fomentar el respeto y la promoción de los derechos infantiles, a través de la participación activa del Estado y de toda la ciudadanía. ¿Por qué urge? Porque necesitamos un futuro mejor como país.

Por Macarena Fernández | 2016-05-31 | 11:32
Tags | infancia, niños, padres, paternidad, educación, hijos, maltrato, crianza, respeto, tolerancia

Puede sonar como un lugar común, pero es cierto: el futuro de Chile está en las nuevas generaciones, es decir, en nuestros niños y adolescentes. Y esa etapa de la vida es en la que se sientan las bases de lo que serán como adultos: personalidad, valores, cualidades, educación, oportunidades, esperanzas, aptitudes, relaciones y lazos se construyen en los primeros años, y es por esto que es tan urgente que como país nos comprometamos a cuidar a nuestros niños y que velemos todos juntos por mejorar su infancia.

Un niño desprotegido, con sus derechos no respetados, un niño abusado, incomprendido, maltratado sicológica o físicamente, un niño al que se le limita su educación y sus talentos, es muy probable que se convierta luego en un adulto complicado, violador de leyes y con relaciones sociales disfuncionales.

El Estado debe velar por derechos básicos, como el acceso a la educación, vivienda, alimentación, salud y por hacer cumplir todos sus derechos infantiles a través de políticas públicas exclusivas para ello, teniendo como foco principal la protección de los niños en todas sus dimensiones y escenarios. Es por esto que en Chile está en proceso de creación el Sistema Integral de Garantías de Derechos de la Niñez y Adolescencia, con leyes y políticas a largo plazo.

Pero el llamado es más grande aún. Para tener un mejor país tanto presente como a futuro, debemos comprometernos todos, es decir, tanto Estado como ciudadanos, a cuidar, proteger y velar por una sana infancia en cada uno de los niños de nuestro país. Y eso es lo que busca fomentar el Consejo Nacional de la Infancia con su nueva campaña: Un Nuevo Trato Con La Niñez.

La campaña que busca incentivar un nuevo trato con la niñez

"¿Eres tonto o te haces?", "No salgo más contigo, mira la vergüenza que me haces pasar", "Pareces payaso vestido así", "No preguntes tonteras", "Los hombres no lloran", "Mariquita Pérez que le pega a las mujeres", "Come y calla", "Porque yo lo digo", "Los tontos se aburren", "No sabe, no sabe, tiene que aprender, orejas de burro le vamos a poner", "Si te reto es porque te quiero"...

Las frases anteriores quizás no nos sorprendan mucho. Es más, es muy probable que la mayoría las hayamos escuchado de nuestros propios padres o usado más de una vez para dirigirnos a nuestros hijos. Pero sí debiese preocuparnos. ¿Por qué? Porque querámoslo o no, frases como éstas integran el maltrato verbal, la forma de violencia más frecuente utilizada con los niños.

"¡Qué exageración! Hoy no se les puede ni retar, ahora todo es maltrato y abuso". Muchos podrán pensar así, pero la verdad es que cada una de estas frases, por muy inofensivas y cotidianas que parezcan, atacan directamente a la autoestima de los niños, los invalida como personas, los carga de prejuicios (a veces contra ellos mismos) y potencian su inseguridad de forma inconsciente. Y por otro lado, incentivan el temor negativo hacia la autoridad y hacia la adultez.

Según estadísticas del propio Consejo Nacional de la Infancia, 7 de cada 10 niños y niñas sufre algún tipo de violencia, especialmente en el colegio o en su hogar. Y el estudio señala que las potencialidades de los niños y niñas dependen decisivamente de su entorno más cercano y no de externalidades; y que los padres y educadores somos los principales agentes formadores del desarrollo de las niñas y niños.

La nueva campaña "Un Nuevo Trato Con La Niñez" hace un llamado a cambiar nuestro trato con los niños, a incentivar la buena convivencia en el hogar, comunidad y colegio; y nos invita a todos a hacernos cargo del futuro de nuestro país que son nuestros niños. ¿Cómo? Empezando con lo más básico y a la vez lo más importante, que es el buen trato y el buen uso de las palabras a la hora de relacionarnos con ellos.

"Me interesa tu opinión", "Me gusta que pienses distinto", "Explícame tu dibujo", "Quiero que juegues", "Te apoyo en las buenas y en las malas", "Quiero saber qué piensas", "Respeto como te vistes", "Eres especial", "Está bien que te equivoques, así se aprende", "Tú puedes hacerlo", "No te preocupes, no es grave", "Admiro que quieras cambiar el mundo", "Qué creativo eres", "Te quiero mucho", "Estoy muy orgulloso de ti". Estas son las frases que nuestros hijos deberían escuchar de nosotros más a menudo.

Los especialistas señalan que cambiando el enfoque de nuestras palabras, buscando siempre ponernos en el lugar de los niños y niñas, utilizando frases integradoras, protectoras, interesadas, inspiradoras y/o cariñosas; estamos empoderando positivamente a los menores, entregándoles autoconfianza, seguridad y dándoles un impulso para querer ser buenas personas, interesadas con su entorno, personas empáticas, con ganas de generar relaciones positivas y con buenos planes a futuro. ¿Y esto en qué se traduce? En futuros adultos sanos, responsables, que contribuirán positivamente en sus familias, trabajos y en el país en general.

Y no se trata de no aplicar disciplina, sino que cuando los critiquemos, que no sea a ellos como personas, sino al acto mismo que realizaron, explicándoles el por qué de nuestro enojo, con cariño y comprensión, entendiendo que a su edad no tienen aún las herramientas intelectuales y emocionales para comportarse como adultos y requieren de nosotros para guiarlos y ayudarles a entender cómo comportarse en la vida.

"Está en nuestras manos mejorar desde hoy las condiciones de vida de niños, niñas y adolescentes. De nosotros y de nadie más depende que estemos a la altura de la hermosa tarea de dar forma desde ya a un Chile más justo y más inclusivo", señaló la presidenta Michelle Bachelet, al respecto.

La campaña llama entonces a tener un trato cuidadoso y cariñoso con nuestros niños, a que las familias se hagan el espacio para conversar, preguntar y apoyarse en todo momento, que les inculquen a los niños el respeto por la tolerancia y la diversidad. Que inculquemos a través del ejemplo el buen trato hacia otras personas y la importancia del esfuerzo, la perseverancia, el trabajo, la unión familiar, el cuidado del cuerpo, la higiene y la importancia de la amistad. Que se sientan libres y apoyados para dar su opinión, para decir cuando algo les molesta, para diferenciarse y explotar sus propios talentos, gustos y aptitudes.

Y por otro lado, nos llama a que les enseñemos a los niños, niñas y adolescentes sus derechos y que luchemos por defenderlos siempre. Sus derechos son los siguientes:

  • A la vida, en condiciones de respeto y dignidad.
  • Al descanso, al juego y la cultura.
  • A un nombre y nacionalidad.
  • A ser protegidos contra el maltrato físico y psicológico.
  • A decir lo que piensan y que su opinión sea tomada en cuenta.
  • A ser protegidos contra el trabajo infantil.
  • A ser guiados y cuidados por nuestros padres, madres y familia.
  • A ser protegidos contra el abuso, la explotación sexual, el secuestro y la venta.
  • A recibir educación en el marco del respeto a sus derechos.
  • A recibir ayuda y apoyo si infringen la ley.

Así que, si queremos un mejor futuro para Chile, si queremos que nuestros niños crezcan sanos y felices para el día de mañana convertirse en adultos comprometidos y en líderes positivos para el país, tenemos que dejar de gritarles, de ningunearlos, de apocarlos; y comenzar a tratarlos con cariño, respeto y dedicación. En las buenas y en las malas.

¿De qué otra forma podemos proteger la infancia?