Una situación de vida o muerte está enfrentando a sus cortos 17 años Jacinta Zañartu Valdés, quien se encuentra internada en la Clínica Las Condes hace más de 90 días debido a su complejo estado de salud que la tiene como prioridad nacional para un doble trasplante de órganos: pulmones y corazón.
Jacinta sufre de hipertensión pulmonar primaria, enfermedad congénita sin cura que se le diagnosticó a los cinco meses de edad y que sin tratamiento médico no hubiese vivido más de 4 años.
Hoy tiene 17 años y ha podido tener una vida relativamente normal junto a Agustina, su hermana melliza, gracias a que la Corte Suprema declaró que la Isapre debía hacerse cargo económicamente de su costoso tratamiento de por vida. Así, hasta hace tres meses seguía yendo al colegio como cualquier otra joven de su edad, hasta que su enfermedad se agravó y tuvo que internarse.
Hace tres semanas que su estado se volvió aún más crítico, por lo que pasó a ser prioridad nacional para el doble trasplante que requiere, aunque ella no está al tanto de que está en una situación tan crítica, para no debilitarla aún más y para que continúe con fuerzas para poder soportar el eventual trasplante.
Jacinta hoy está sedada, conectada a una ECMO, máquina que hace la función de órganos, pero debido a la cantidad de tiempo que lleva dependiendo de un sistema externo, el resto de sus órganos también está comenzando a debilitarse y hoy presenta problemas renales.
"La situación de Jacinta hoy es crítica porque está comenzando con falla renal y tenemos un muy corto plazo para que ella siga en condiciones de ser trasplantada. Mientras más tiempo esté conectada existe mayor riesgo de que pueda generar una falla como trombosis o infecciones que no le permitan acceder a un trasplante", explicó el jefe de la Unidad Coronaria de la Clínica Las Condes, Juan Carlos Vengas.
Su madre, Claudia Valdés, hizo un llamado desesperado a la donación de órganos porque a Jacinta no le queda mucho tiempo: "Sabemos que no es (una decisión) fácil. Nos conectamos con el dolor de esas familias, que están pasando algo parecido a nosotros con la diferencia de que ellos pueden darnos una esperanza para Jacinta (...) saber que perdiste a alguien querido y pudiste ayudar a otro, de alguna manera, te reconforta en esa pérdida", expresó.
El doble trasplante es la única oportunidad que tiene Jacinta para seguir viviendo, de lo contrario, la misma joven le dijo a su familia que si ella no lo lograba, quería donar todo lo que fuera útil de su cuerpo para que otras personas siguieran viviendo. Los órganos recibidos tienen que ser del mismo donante de Santiago, ya que la operación debe realizarse en un período máximo de tres horas post muerte del donante, y de manera simultánea.
El año pasado fue Cristóbal Gelfenstein quien estuvo en el mismo lugar de Jacinta, y su caso fue celebrado por el país completo. En diciembre finalmente llegó el donante y Cristóbal, quien se encontraba en estado crítico, fue trasplantado exitosamente y su cuerpo soportó sus nuevos pulmones a la perfección. Hoy el joven hace una vida normal. Esperemos que Jacinta corra la misma suerte y que pueda disfrutar de muchos años más gracias a la generosidad de alguna familia donante.