Imagen: César Mejías

Estudiantes chilenos “rediseñan” el calefón para no desperdiciar agua al calentarla

Esa espera matutina antes de entrar a la ducha no sólo quita tiempo, también es una pérdida de agua. Mira cómo buscan solucionarlo estos jóvenes, a través de un prototipo que logró ganar el concurso de Aprendo Emprendo.

Por Rodolfo Westhoff @rwesthoff | 2016-08-08 | 14:12
Tags | agua, ahorro, calefon, eficiencia, desperdicio, innovacion, chile, jovenes, estudiantes, aprendo, emprendo, concurso

La escena es la siguiente: son las siete de la mañana y suena el despertador. En tu mente crees que debe ser un error, porque aún sientes que no dormiste ni un cuarto de lo que te habría gustado. Miras tu celular y la hora está correcta, así que te levantas. Vas al baño, abres la llave de la ducha y esperas, esperas, esperas, esperas… Después de un buen rato tocas el agua para ver qué tan caliente está. “Nop, no está lista”, piensas, así que esperas un poco más.

No es que sea un problema con el que se nos venga abajo el mundo, pero más allá del tiempo que le dedicamos a morir de frío mientras se calienta la ducha, hay otro dilema mucho más importante: ¡estamos desperdiciando mucha agua en el proceso!

Bueno, en eso se fijaron los ganadores del concurso de Aprendo Emprendo 2014. Se trata de los jóvenes Samir Hadwa y Catalina Barría, que en ese entonces cursaban primero medio (ahora están en tercero) y quienes fueron capaces de crear un prototipo de sistema externo al calefón que permite que no se desperdicie tanta agua cuando esperamos que se caliente.

¿Cómo funciona?

Al aparato lo llamaron Hidrosot. Consiste en un dispositivo que se ubica en la parte inferior del calefón y permite que el agua fría recircule en éste hasta que se caliente. Está compuesto por un sistema electrónico, válvulas y un sensor de temperatura.


Así, cuando el agua fría sube por la tubería hasta llegar al calefón, pasa por la cañería de agua caliente, en donde se mide su temperatura. Si es igual o mayor a la que nuestro exuberante y caribeño cuerpo requiere (según lo que hayamos ajustado en un panel), se abre la válvula que permite que el agua llegue a la grifería. Al mismo tiempo, se cierra otra válvula, impidiendo que el agua recircule.

Pero si es que aún está muy helada, la válvula que conduce hacia la grifería se cierra y se abre la otra, permitiendo la recirculación del agua fría en el calefón. Esto se repite hasta que se alcanza la temperatura deseada, desencadenándose entonces el proceso que mencionamos anteriormente. ¡Y voilá! Todas las llaves conectadas al calefón podrán usarlo: lavaplatos, lavamanos, ducha, etc.

Eso sí, el agua que ya se encuentra en la cañería al momento de abrir la llave sí o sí se perderá. “Esa porción de agua es mínima e irrecuperable, así que no podemos hacer nada con ella”, nos explica Samir. Y agrega que lo que verá el usuario es que “se abrirá la grifería y verá un poco de agua saliendo. Después se cortará y ahí es cuando hay que esperar a que el agua se caliente mientras recircula”.

Además, Samir nos cuenta que gracias al equilibrio térmico, el agua que sigue entrando y entra en contacto con la que ya está caliente, asimila esa temperatura, así que sólo hay que esperar una vez.

¿De dónde nació la idea?

Catalina nos cuenta que todo surgió durante un taller de matemáticas avanzada en el colegio, en donde estaban tratando la robótica. “Estuvimos aproximadamente dos meses buscando algún tipo de problema que podamos resolver a través de la robótica, matemática y física, hasta que finalmente llegó a nosotros la idea sobre ahorrar agua cada vez que se espera que esta eleve su temperatura”, explica.

¿Cuál es el futuro de Hidrosot?

Hasta ahora la idea sigue como un prototipo, aunque Catalina y Samir han seguido trabajando en ella para perfeccionarla. También agregan que tienen la intención de probarlo en circunstancias reales, algo en lo que hasta ahora han recibido ayuda de amigos y familiares. “De cierta forma nos han ayudado a llegar a las instancias en que nos encontramos, ya que han hecho pruebas de pérdida de agua en sus casas y han aportado mucho”, comenta Catalina. Eso sí, destaca que se encuentran en tercero medio y que sumado al preuniversitario y los deportes, les deja muy poco tiempo libre como para poder dedicarse de lleno a Hidrosot (aunque siempre se hacen el espacio). Su objetivo, aseguran, es poder ver este dispositivo a la venta en todas las grandes tiendas, para que llegue a muchos hogares y así se pueda ahorra muchísima agua, además de dinero.

El rol de Aprendo Emprendo

Como les contamos, Catalina y Samir ganaron el concurso de AprendoEmprendo.cl del año 2014 (ojo, que este año también se está llevando a cabo. Si quieres saber más haz click aquí). Pasar por esta experiencia fue clave para ellos en cuanto al desarrollo de Hidrosot.

“La verdad, AprendoEmprendo.cl cumplió un rol súper importante tanto para el proyecto, como para nosotros como personas. Por un lado nos enseñaron mucho sobre modelos de negocio, comercialización y como implementar tu idea, aprendizajes que sin duda hemos aplicado a Hidrosot y nos ha servido harto. Por otro lado, en cuanto a nuestro crecimiento personal, gracias a AprendoEmprendo pudimos ampliar nuestra visión de ver las cosas, los estudios y las personas, principalmente por las instancias que compartimos en el concurso en sí, y por el viaje que ganamos, que de todas formas nos mostró la multiculturalidad del mundo y nos abrió los ojos”, comenta Catalina.

¿Qué te parece Hidrosot? ¿Crees que es un mecanismo viable para evitar el desperdicio del agua?