Imagen: César Mejías

¿Más delincuencia en Chile? Los datos de la percepción versus la realidad

En 11 de 15 regiones disminuyeron los homicidios, robos de vehículos, casas y hurtos, y esto se traduce en que, en lo que va del año, ya hay más de 30 mil casos policiales menos que en 2015.

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Cuando se habla de delincuencia y seguridad ciudadana en el país, lo primero que se tiende a pensar es que estamos pésimo, cada día roban más autos, asaltan a más personas, hay más muertes, etc. Es la sensación con las que muchos viven. Pero, a pesar de que queda mucho para erradicar la delincuencia en Chile, las cifras indican que en los últimos años ha ido bajando la tasa de delitos de mayor connotación social.

¿Qué son los delitos de mayor connotación social? Los robos violentos, hurtos, lesiones, violaciones, homicidios, entre otros.

Las cifras son claras cuando se quiere saber qué piensan y sienten los chilenos respecto a la delincuencia: cada vez hay más, peores y con más frecuencia. Pero, ¿es solo la sensación de inseguridad? ¿Realmente la delincuencia va de mal en peor en Chile?

La noticia fue positiva y los vimos en todos los medios: los delitos han disminuido. Los datos son del último balance que dio a conocer el gobierno y en El Definido quisimos agregarle una comparación para mostrarles el fuerte contraste que existe entre la sensación de que la delincuencia en Chile está cada vez peor y la realidad. ¿Y para qué? Para que nos demos cuenta de cómo se puede distorsionar nuestra percepción, creando prejuicios o mitos que no son reales.

Sensación de inseguridad y victimización

Cuando vamos a las últimas encuestas hechas en el país sobre victimización, nos encontramos con la Encuesta Nacional Urbana de Seguridad Ciudadana 2015 (ENUSC). Uno de los puntos más relevantes dentro de los resultados, fue cuando se les preguntó si percibían que la delincuencia del país aumentó en los últimos 12 meses.

El resultado fue clarísimo: desde 2012 que viene creciendo la sensación de que va en aumento constante. En 2015, el 86,8% dijo que sentían que la delincuencia había aumentado. (Ver recuadro)

“Personas que perciben que la delincuencia del país aumentó”

2012: 70,6%
2013:71,2%
2014:        79,9%
2015:      86,8%


En otra encuesta, de Adimark de Paz Ciudadana con los resultados del estudio de 2015, se les preguntó a los chilenos si creían que la delincuencia aumentaría, se mantendría o bajaría. Nuevamente la tendencia fue clarísima: 65,4% cree que aumentará, 25,9% dijo que se mantendría, y solo un 7,2% piensa que hay posibilidades de que baje.Fuente: ENUSC 2015

Como si eso fuera poco, el 27,2% de los chilenos siente siempre miedo a ser asaltado y un 25,9% siente miedo con frecuencia. Es decir, más del 50% de la población vive atemorizada.

Sin embargo, estos datos corresponden a la sensación que se tiene frente al tema, pero no muestran, necesariamente, una realidad objetiva. De hecho, es muy distinta. ¿Cuál es entonces la realidad de Chile?

2016: la tasa más baja en delitos en los últimos 10 años

Esta semana se dio a conocer el balance del Gobierno sobre los delitos cometidos en 2016, respecto al 2015. Y por primera vez en mucho tiempo, los resultados fueron visiblemente favorables, lo que claramente trajo bastantes caras alegres en La Moneda.

Los delitos de mayor connotación social registraron la tasa más baja en los últimos 10 años; entre enero y octubre de este año se registraron 2.595 delitos por cada 100 mil habitantes, mientras que en 2013 fueron 2.821 y su pick más alto fue en 2011 con 3.160 delitos. Es decir, si aterrizamos los números a un plano más pequeño, el último año se registraron 2,6 delitos por cada 100 habitantes.

Además, con respecto al 2015, hubo 30.330 casos policiales menos, es decir que la delincuencia bajó en un 6,8%.

En comparación con el "peak histórico" de delincuencia en 2011, este año hubo 77.900 menos casos policiales. 

Sin embargo, la baja en este tipo de delitos viene ocurriendo desde hace más de un año. De hecho, después del 2011, 2012 y 2013, la cifra bajó a 2.848 por cada 100 mil habitantes y a 2.821, respectivamente. En 2014 hubo una leve subida, pero luego el año que siguió continuó la baja hasta este año (ver imagen).

Viendo las cifras de cada tipo de delito en el gráfico, todas disminuyeron, menos a la violación, que aumentó en un 1%.

Sin embargo, este último balance no estuvo exento de críticas y es justo que las consideremos también. Luego de que el Subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy dijera que este logro era “gracias al trabajo en conjunto entre las policías y el sistema judicial”, el diputado RN, Gonzalo Fuenzalida, señaló a La Tercera que le pedía al Gobierno ser más “prudente, aún más cuando sabemos que hay una cifra negra”.

Es decir, una cifra que no se puede cuantificar. El balance se basa en las denuncias hechas por cada delito, por lo que cuando se habla de cifra negra, se refiere a todos aquellos delitos que se cometieron pero de los cuales no hay registro, por no haber denuncia por parte de la víctima.

Sobre ese último punto, es que el especialista en seguridad pública de la Universidad de Santiago, Jorge Araya, afirmó que las cifras se basan en datos parciales, porque solo consideran las denuncias.

“Ya sabemos que (los resultados) son parciales porque solo alrededor de un 45% o 47% de la gente hace este trámite (denuncia) cuando es víctima de un delito”, dijo Araya. Además, agregó que las personas ya no hacen las denuncias porque “no creen en el sistema, tiene desconfianza”.

Lo cierto es que las cifras oficiales de delincuencia siempre se han medido en base a las denuncias, así que de todos modos se puede confirmar esta tendencia a la baja cuando de delitos de mayor connotación social se trata. Si la desconfianza en el sistema ha influido sobre la cantidad de denuncias, es algo difícil de comprobar. De todos modos, tenemos otra herramienta.

¿Sensación de inseguridad o realidad?

Estas cifras que mostramos no son las únicas para hacernos una idea de la delincuencia en Chile. En la misma encuesta ENUSC, y por primera vez, se hicieron dos preguntas: ¿Usted o alguien miembro de su hogar fue víctima de daños, delitos económicos, amenazas, en los últimos 12 meses? y ¿usted o algún miembro de su hogar fue víctima de intento de robo en los últimos 12 meses?

Los resultados indicaron lo siguiente:

¿Usted o alguien miembro de su hogar fue víctima de daños, delitos económicos, amenazas, en los últimos 12 meses?

  • -Los que respondieron que “sí”
Daños: 9,3%
Delitos económicos:                   8,0%
Amenazas: 3,5%

¿Usted o algún miembro de su hogar fue víctima de intento de robo en los últimos 12 meses?

  • -Los que respondieron que “sí”
Intento de robo con violencia o intimidación:        3,4%
Intento de robo por sorpresa: 2,7%
Intento de robo con fuerza en la vivienda: 4,2%
Intento de robo desde vehículo: 2,2%
Intento de robo de vehículo: 5,9%

Estas respuestas por los encuestados son un tanto contradictorias. Como ya vimos, más de un 86% percibe que la delincuencia ha aumentado…aun así, ni un 6% de ellos fue víctima de un intento de robo en el último año.

Si bien, como dijo el especialista en seguridad pública, Jorge Araya, hay que esperar antes de “cantar victoria y sacar conclusiones mientras no tengamos la posibilidad de comparar esos datos de denuncia”, la realidad es que la delincuencia ha ido disminuyendo.

De hecho, la encuesta ENUSC arrojó que los ciudadanos denuncian los delitos cada vez con más frecuencia y si le creemos a la encuesta, Araya estaría equivocado en su primera crítica. En 2013 un 39,8% dijo denunciar el último evento en al menos un delito, mientras que en 2014 un 37,2% lo hizo. Pero el último año 2015, un 40,3% dijo haber hecho la denuncia.

¿Y de qué sirve todo esto?

Además de confirmarles la buena noticia de que en Chile hay menos delincuencia que antes (a diferencia de lo que mayoría podría pensar), en El Definido quisimos demostrar cómo la percepción de las cosas puede ser completamente distinta a la realidad y no somos capaces de verlo.

Este caso es uno de tantos, pero hemos visto lo mismo con respecto a otros temas, como la percepción ante los inmigrantes por ejemplo. ¿Cuánto de lo que creemos es realmente verdad? Cuando damos algo por sentado sin confirmar los hechos, opinamos, actuamos o tomamos decisiones con una idea errada del mundo que nos rodea. Promovemos prejuicios que no son constructivos y miedos que nos impiden ver el mundo como realmente es.

De hecho, en la encuesta ENUSC cuando se les preguntó a los encuestados cómo se habían formado esa opinión, un 69,7% dijo que a través de los medios de comunicaciones, tanto prensa escrita, radio y televisión. Y solo un 30% dijo que formó su opinión sobre la experiencia personal.