-¿Es un pájaro?

-No, ¡es un avión!

-¡¿Es una salchicha?

-Oh, no, era solo un dron.

Este diálogo podría tomar lugar en Providencia, si es que llega a ser la primera comuna del país en incorporar drones a su sistema de vigilancia. Aunque aún falta para que eso se pueda concretar. El anuncio lo hizo la alcaldesa de la comuna, Evelyn Matthei, pero se trata de un proceso que requiere licitaciones (y, por lo tanto, la aprobación del concejo municipal).

Como explicó la edil en una entrevista para el diario La Segunda, serían tres los artefactos que se usarían con estos fines, los que volarían a una altura de 300 metros y que funcionarían las 24 horas en los sectores de Avenida Providencia y Parque Bustamante, con una autonomía de 45 minutos. ¿El propósito? Vigilar el microtráfico de drogas, la prostitución y la delincuencia.

¿Por qué genera tanto ruido?

Pero si se podrá llegar a realizar o no, aún no sabe. Esto, ya que el tema ha abierto un fuerte debate en torno al tipo de seguridad que requieren los vecinos, sobre todo por los temores de que los drones puedan invadir la privacidad de los habitantes de la comuna.

Y esta no es una discusión nueva. Primero, por el caso de los globos en Las Condes y Lo Barnechea el año pasado, pero además, porque es algo que se viene conversando desde hace unos años en varias partes del mundo. Por ejemplo, en un informe del 2011 de la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles, organización sin fines de lucro dedicada a proteger los derechos individuales de las personas, se detalló una serie de aspectos de los que se debería tener cuidado a la hora de implementar este tipo de seguridad. Entre ellos:

Voyerismo: la organización advierte que, sin las precauciones adecuadas, los drones podrían ser utilizados en algunas ocasiones para registrar la intimidad sexual de las parejas en sus hogares. Para esto, cita un caso del 2004 en el que un helicóptero hizo eso gracias a una cámara de visión nocturna.

Vigilancia discriminatoria: también destacan que este tipo de sistema de seguridad da pie para que la vigilancia se realice de acuerdo a patrones racistas, clasistas o arbitrarios. Por ejemplo, mencionan que en Gran Bretaña, las personas de raza negra tienen más posibilidades de ser observadas con mecanismos de seguridad que las de raza blanca.

Rastreo: otro aspecto tiene que ver con la capacidad de los drones, mediante softwares especializados, de rastrear a personas “común y corrientes” gracias a sistemas de GPS. Eso significaría que las autoridades podrían recopilar información acerca de las rutinas de las personas, por dónde se movilizan y hacia dónde van.

El caso de Nepal

Ahora bien, Providencia no es el primer lugar del mundo en donde se pensó la idea de instalar este sistema de vigilancia. Por ejemplo, en la ciudad de Katmandú en Nepal, se estableció un esquema de monitoreo a partir de drones con un propósito muy específico: identificar a las personas que van a arrojar basura al río Bagmati.

Se trata de una de las medidas contempladas en el programa para limpiar a este río altamente contaminado y, respecto a los drones, el proyecto está siendo ejecutado por un grupo de estudiantes de la Universidad de Seúl, de Corea del Sur.

Lo que pasó en Estados Unidos

En Estados Unidos también se cuecen habas. En la ciudad de Baltimore se implementó este sistema, aunque hubo un pequeño detalle que hizo que todo fuera más polémico: ¡se instaló el sistema de vigilancia de drones sin avisarle a nadie! Así es, al menos durante dos meses, los baltimorianos fueron observados desde el cielo por pequeños robots voladores sin siquiera saberlo.

Eventualmente, el hecho fue confirmado por la policía local, que además detalló cómo era el funcionamiento de esto. Básicamente, una empresa especializada en drones captaba información a través de esta máquina y se la entregaba a la policía para que hicieran su trabajo.

El éxito en India

Otro ejemplo en donde esto se puso en marcha es en Dehli, en la India, en 2014. Originalmente empezó como un modo de vigilar lo que ocurría en una serie de manifestaciones que estaban ocurriendo en el país. Pero al poco andar, se empezó a utilizar en otros ámbitos: chequeo de zonas difíciles de alcanzar por tierra, vigilancia de crímenes domésticos o a nivel comunitario, etc.

A fin de cuentas, la medida habría sido útil para que las autoridades fueran capaces de dirigir de manera más eficiente los recursos y la ayuda pertinente para las localidades que se vieran afectadas por algún problema. Y hasta ahora sigue siendo un método usado en el país para estos efectos.

¿Qué hacemos entonces?

Mientras que por un lado hay quienes que creen que implementar este tipo de sistemas sería una profunda vulneración a la privacidad de las personas, hay otros que consideran que podría ser una medida útil para combatir una serie de problemas que aquejan a nuestra sociedad. ¿Qué opinas tú?

Como sea, te dejamos con este video del 2013 de la cuenta de YouTube Alex Cornel, en donde recrean lo que sería un futuro no muy lejano en donde los drones sean artefactos clave para el monitoreo de las ciudades.

¿Estás de acuerdo con el uso de drones para vigilar la comuna de Providencia?