Por primera vez, en mucho tiempo, Chile se presenta como equipo titular en la Copa Confederaciones 2017, torneo de fútbol que reúne a las selecciones triunfadoras de las Copas de cada continente, al campeón del Mundial anterior y al futuro anfitrión.

Representando a América, y como bicampeones, nuestra querida "Roja" llegó a Rusia a demostrar una vez más el talento incuestionable de nuestros futbolistas, y como era de esperarse, una gran ola de hinchas se embarcó para alentar y acompañar a nuestra querida selección.

Ayer pudimos escuchar con orgullo la entonación a coro de nuestro himno nacional en el Kazán Arena que no pasó desapercibido y pudimos ver las gradas del estadio teñidas de rojo con los más de 7 mil chilenos camiseteados que presenciaron el partido Chile-Alemania.

Escenario que se repetirá este domingo a las 11:00 hrs. (de nuestro país), frente a la selección de Australia y que determinará si Chile pasa a las semifinales.

En El Definido conversamos con seis chilenos que se encuentran en Rusia, y nos contaron cómo la Marea Roja se ha tomado las calles, cómo los han recibido los rusos y sobre las impresiones que han ido recogiendo de este tremendo y lejano país: cuna de escritores, líderes políticos y referentes de cultura e historia a nivel mundial.

¿Cómo se está viviendo el ambiente de la Copa Confederaciones y cómo han recibido en Rusia a la Marea Roja?

- Andrey Dorat (AD), ingeniero en Administración de Empresas, 39 años: "El ambiente a mi parecer es bastante bueno. La gente, en general, sobre todo los jóvenes y niños, están bastante informados sobre la Copa, no así las mujeres. Los rusos en general han sido amables, aunque la población adulta casi no habla inglés. Me he sentido bastante observado, imagino que es poco común para la gente de estos lados ver un moreno que no tenga rasgos árabes, y en el estadio, la reacción de los rusos ha sido muy cordial, me han pedido muchas fotos, reconocen a Bravo, Vidal y Alexis y también tratan de pronunciar nuestro famoso Ceachei".

- Marcela Larraín (ML), diseñadora, 30 años: "La copa en general ha tenido poca publicidad o notoriedad. A los rusos con los que me he topado no les interesa tanto el fútbol y tampoco he visto muchos hinchas de otros países a excepción de los chilenos que somos miles acá en Rusia. El gran ambiente que se ha armado ha sido gracias a la Marea Roja".

- Camilo Silva (CS), artista visual, 31 años: "Siendo Rusia un destino turístico importante a nivel mundial, aún así la gente parece extrañarse por algunas actitudes de esta horda de invasores pseudo sedientos de algo distinto. La Marea Roja es medio cancerígena. Puedes invadirte de ella, como también, con mucha suerte, superarla".

- Valentina Zegers (VZ), psicóloga, 28 años: "Ha sido una experiencia muy buena estar con tantos chilenos después de vivir fuera de Chile (Londres), también estar con chilenos que vienen de distintas partes del mundo (Suecia u otros países de Europa) y todos los que vienen directamente desde Chile. Se ha armado un muy buen ambiente donde todos se hablan y comparten. Se siente un "compatriotismo", como un concepto de familia. También ha sido interesante estar tan lejos y en un lugar tan distinto como Kazán y escuchar a todos hablando en chileno".

- Cristián Arce (CA), periodista, 30 años: "El ambiente se vive con mucha pasión y felicidad. La gente en Rusia es muy amable y muy respetuosa. Hay que reconocer qué hay mucha seguridad en las calles. La verdad no es la fiesta del mundial ni la locura en las calles. Pero hay chilenos en todos lados, especialmente en Moscú y en Kazán".

¿Cómo ha sido la experiencia de compartir con hinchas chilenos en un país tan lejano?

AD: "Mis amigos y yo no hemos adherido a las juntas varias que han hecho el resto de los hinchas, como banderazos y esas cosas. Aunque en los vuelos y bares nos hemos encontrado con chilenos, muy hiperventilados. Lamentablemente siempre hay desubicados como por ejemplo, la típica bromita de hacer que una joven rusa repita alguna ordinariez".

ML: "Ha sido increíble, somos miles y se vive una muy buena onda de compañerismo. La selección provoca un espíritu de alegría y de unidad. Todo el día se escuchan cantos de la barra en las calles, sobretodo en Kazán que es más chico y la Marea Roja ha invadido la ciudad. Los rusos se sacan fotos con nosotros jaja y los de Kazán quedan felices cuando les decimos que somos de Chile. Eso sí, cuando la Marea Roja invade bares en las noches, los meseros colapsan y ahí no nos quieren nada".

CS: "El solo hecho de generarse una pregunta de este tipo, asume que "algo" pasa cuando un grupo de personas se saben chilenos, fuera de Chile. Cosa impensada para otros países. Más allá del chauvinismo instalado en este orden de eventos deportivos, se instala lo consanguíneo de manera muy tácita: independiente de si te interesa conocer al chileno del lado, cosa difícil, sospecho de que este vínculo, de facto, se cocinó en la dictadura con la formación de esa fraternidad y compañerismo del exilio".

VS: "Es un ambiente festivo. Se ve que el país está haciendo un esfuerzo por recibir a turistas, a pesar de ser una cultura muy distinta a lo que estamos acostumbrados en Occidente, han sido muy acogedores y amables. Y se ve que los rusos están muy impresionados de los chilenos, piden sacarnos fotos y en el estadio graban cuando la gente grita. También en la calle gritan ‘Chile’, y los días de partidos están todos con la polera y gritando, tratando de hacer patria".

CA: "La experiencia de compartir con chilenos en Kazán ha sido bonita. Acá hay un centro que se llama Cuba Libre que se ha transformado en el centro neurálgico de la Marea Roja. Es un restaurant de cubanos que recibió a los chilenos y que, por ejemplo, les permitieron hacer empanadas y tomar piscolas. Ha sido como una revolución la cantidad de hinchas chilenos, sobre todo con los gritos de Ceachei en todas partes, y los rusos nos han brindado un muy buen trato".

¿Qué es lo que más te ha llamado la atención de Rusia?

AD: "La gran historia que hay detrás de cada ciudad, una riqueza cultural enorme. También, en ciudades como Moscú y San Petersburgo, me ha sorprendido el gran nivel de lujo que tiene la clase acomodada, que es tremendamente ostentosa”.

ML: "Lo primero que me ha impactado es la belleza de Rusia (Moscú y Kazán). Ha sobrepasado todas mis expectativas. Lo otro que llama la atención es el idioma que no se entiende en lo más mínimo y además, como tienen alfabeto cirílico, es más complejo aún. La falta de inglés acá no ayuda mucho, pero de algún modo logras comunicarte".

CS: "Sin ser una gran sorpresa, sino más bien la confirmación de algo que había investigado brevemente hace un tiempo, el sentido decorativo de los rusos me llama muchísimo la atención. Existe, en los interiores de casa ‘comunes y corrientes’ una preocupación por el brillo y lo nuevo, pero de mala factura. Logra ser una habilidad el recargar visualmente los espacios con pocos elementos. Hay muchos guiños hacia lo kitsch, a veces rozando lo cursi y compartiendo maneras decorativas y colores que se dan mucho en casas del norte grande chileno".

Ángeles Molina, socióloga, 31 años: "Me ha llamado la atención la decisión deliberada de presentarse como un referente cultural distinto a Occidente, donde todo está en ruso, pocas cosas traducidas a otros idiomas, signos que son diferentes a los que usamos, supermercados con cosas principalmente locales y pocas marcas globales. Kazán tiene un encuentro interesante entre dos religiones, donde conviven el islam y la religión ortodoxa, lo cual es visible en el Kremlin, donde está la iglesia frente a la mezquita. También es una ciudad muy bien mantenida, con un patrimonio impresionante, de hecho el Kremlin de Kazán es Patrimonio de la humanidad de la Unesco".

CA: "Lo que más me ha llamado la atención es la cultura. Después del triunfo contra Camerún fuimos a conocer la Plaza Roja, la catedral de San Basilio, y al salir del metro quedé impresionado. Me emocioné mucho, todo es muy muy lindo. Acá en Kazán también, la fortaleza del Kremlin es maravillosa y la catedral de la Anunciación, donde se hacen todos los eventos sociales, es realmente increíble. He podido palpitar lo que es la cultura islámica. Acá hay muchos islámicos y hemos podido interactuar con su cultura que me ha sorprendido mucho".

¿Qué cosas atractivas o positivas rescatarías de la cultura rusa?

AD: "Por sobre todo, la amabilidad de la gente joven. Son tremendamente atentos".

ML: "Me ha impresionado la limpieza y seguridad de las ciudades. Lo otro, es la vida de parques. En Moscú estuve en el parque Gorky un domingo y estaba repleto de rusos practicando skate, monopatín, patines, bicicleta, beach volley, etc. Me fui a las 11 pm y seguía lleno. Otra cosa que rescataría es la capacidad de cuidar y valorar la ciudad, sobre todo los monumentos y lugares históricos. Hay un trabajo enorme de restauración y renovación".

CS: "Sin poder tener verdad muy acabada sobre la cultura, y pese a lo amable de la mayoría de la gente (en situación de turismo, por supuesto); pareciera que el cine norteamericano de los 70s hizo un buen trabajo en la caricatura del ruso promedio: son como en las películas".

VS: "A pesar que los rusos respetan mucho su cultura y su idioma, tratan de hacer un esfuerzo para comunicarse y acoger a los turistas. Rusia tiene una cultura riquísima, muy diferente a lo que se puede ver en otros países de Europa, lo que la hace muy interesante. Llama la atención la importancia que le dan a la religión, estando por ejemplo iglesias ortodoxas dentro de los Kremlin, donde también está el poder político. (En Moscú solo iglesias ortodoxas, en Kazán iglesias ortodoxas y mezquitas, porque conviven las dos religiones). También sorprende en Moscú la monumentalidad de la ciudad, sobre todo las avenidas (que la mayoría no se pueden cruzar por arriba y hay que cruzar por túneles bajo las calles) perspectivas y edificios. El metro también llama muchísimo la atención, en donde algunas estaciones son verdaderos museos, ya que lo construyeron para hacerlo "el palacio del pueblo"; es muy limpio y tiene mucha frecuencia".

CA: "Me ha llamado la atención que los rusos son personas muy educadas, respetuosas y amables. Es gente que conoce y está orgullosa de su cultura. Son personas abiertas y muy dispuestas a ayudar. El primer día estábamos perdidos con la dirección del hotel y una señora dejó de hacer sus cosas y nos llevó hasta la puerta. Los rusos están muy interesados por saber cómo se vive en Chile y cómo es nuestra cultura. Uno tiende a pensar que son fríos y distantes y son todo lo contrario".

¿Qué te parecen sus opiniones y qué aportarías a su visión?