Se podría decir que en la familia de las monedas chilenas se está experimentando el síndrome del nido vacío. Las más chicas abandonan el hogar y se van quedando solo las más grandes. Hasta el final de los tiempos. Sumidas en la absoluta soledad.
Bueno, no es para tanto. Como ya sabrán, las monedas de $1 y $5 dejarán de producirse, así que ahora la más chica será la de $10. ¿Por qué se van las otras dos? Principalmente por un fenómeno llamado inflación: a medida que los productos y servicios se vuelven más caros, el dinero cada vez va valiendo menos.
Así, llegamos a un punto en el que los ejemplares de $1 y $5 prácticamente no nos sirven de nada. De hecho, al Estado le sale más caro producirlas que tenerlas, porque fabricar una moneda de $1 cuesta $6 y una de $5 cuesta $17.
Si no se dieron cuenta, todo esto asunto significa que solo podremos pagar en múltiplos de 10, por lo que las promociones de “2 x 1.999” van a desaparecer. Bueno, no en los carteles, pero sí cuando tengamos que pagar en la caja, porque ahí llegará el momento de redondear los números, chan, chan, chan.
Eso sí, para el redondeo no se utilizó la fórmula matemática típica, así que no aleguen los entendidos. El Banco Central estipuló que deberá hacerse de la siguiente manera:
Se redondea para arriba: si el último dígito está entre 6 y 9. Es decir, en vez de pagar 766, se pagarán 770.
Se redondea para abajo: si el último dígito está entre 1 y 5. O sea, si el valor es de 764, se pagarán 760.
Fácil, ¿no?
Ojo, que el redondeo aplica solo para pagos en efectivo y no a pagos con cheques, tarjetas, transferencias u otros medios electrónicos, según explican desde el Banco Central. Tampoco tiene efecto tributario, por lo que el valor de la boleta o factura seguirá reflejando el precio de la transacción sin redondear.
Hay que tener en cuenta que esto no significa que las monedas de $1 y $5 quedaron obsoletas para siempre. Todavía podrás pagar con ellas y recibirlas como vuelto (aunque el Banco Central le sugirió al comercio que deje de entregarlas). En el fondo, se dejarán de fabricar e irán desapareciendo paulatinamente.
Además, desde el 2 de noviembre podrás cambiar estas monedas en el Banco Central de Chile (Agustinas 1180, Santiago), en cualquier sucursal del Banco Estado o en los distintos bancos que se destinaron para esto y que podrás encontrar aquí.
¿Y los pesitos para donar? Si antes donábamos 3 pesos a alguna fundación en algún supermercado, ahora esa donación deberá realizarse después de redondear la cifra.