Que vuelvan los temas centrales

Hermes está nostálgico. Echa de menos cuando las películas tenían un gran “tema central”, esa canción con la que identificabas la historia y hasta tenía video clip. Por lo mismo nos hace sus top 5 de las mejores canciones principales de los clásicos del cine.

Por Hermes Antonio | 2014-05-02 | 13:58
Tags | hermes el sabio, cine, películas, flims, temas centrales, ghostbuster, soundtrack, rocky, volver al futuro

Niños hagan un círculo, el abuelo Hermes les va a contar una historia. Yo sé que no me van a creer, pero hubo una época principalmente durante la década de los ochenta, en que (escuchen esto) todas las películas famosas tenían lo que los expertos en melomanía llaman un “tema central”. 

El “tema central” era una canción pop, preferentemente pegote, que se asociaba a la película indisolublemente, y se transformaba en su “embajadora oficial” en el mundo de la música, no sé si me entienden. 

Y aunque ustedes no hayan vivido esa época, seguro han escuchado muchos “temas centrales”, porque estas canciones se hacían famosas a veces incluso más que sus propias películas. 

Estos “temas centrales” salían mínimo una vez en la película a la que pertenecían, y eso podía ser al principio, en alguna escena importante de la película, durante los créditos finales, o todas las anteriores. 

Y lo más chistoso de todo es que hacían un videoclip para este tema central, que tenía pedazos de la película intercalados a el o la cantante de la canción, resultando en un mutante que no era ni videoclip ni tráiler, sino un poco de ambos. Esto obviamente servía para hacer márketing, para que la gente se familiarizara con las películas, los personajes, los conceptos, la canción, y finalmente sintiera más ganas de ver la película y de comprar el soundtrack, por qué no. 

Por algún motivo esta costumbre de los temas centrales fue quedando atrás. ¿Se imaginan si las películas de Batman de Christopher Nolan terminaran con alguna canción pop cantada por alguien famoso, y esa canción tuviese un videoclip? Bueno las Batmans de los noventa todas tuvieron “temas centrales”, algunas incluso más de uno.

Prince hizo el “Batdance” para la uno. Los Siouxsie and the Banshees hicieron “Face to Face” para la dos. La tres tenía esa canción “Kiss from a Rose” de Seal, y una de U2. Todas con sus respectivos videoclips con pedazos de la película. Lo juro. 

No sé exactamente cuándo se terminó esta costumbre del tema central, pero creo que Titanic fue la película que empezó a matar la onda, básicamente porque todos quedaron chatos con esa canción y el mundo dijo BASTA. Lo intentaron con las películas de “El señor de los Anillos” (Enya, Annie Lenox, Björk Falsa), pero nadie pescó mucho ni se hicieron famosas. No tan famosas como otros temas centrales. 

¿Quién no se acuerda de la canción de Breakfast Club por ejemplo? (Don’t you forget about me, de Simple Minds). ¿O de la de Footloose? (Footloose, Kenny Loggins). Algunas películas tenían incluso dos temas centrales, uno de acción y uno de amor (Top Gun, Batman Forever, Flashdance). Hasta los dramones tenían tema central (“Against All Odds”, de Phil Collins), y las películas de acción también (“It was probably me” de Arma Mortal 3). 

Y como los echo de menos, decidí hacerles una lista con mis cinco temas centrales favoritos de todos los tiempos, a ver qué les parecen.  


Top #5: “Neverending Story” de Limahl (para La Historia sin Fin). 

Esta canción es demasiado pegote y cualquiera que haya visto la película sabe que está indisolublemente asocida a la historia del indiecito ese que viajaba arriba del perro dragón para salvar al reino de Qué Sé Yo mientras el otro tontorrón leía el libro. Es toda cósmica la canción y tiene ese coro del demonio que a uno nunca se le olvida. Increíble.


Top #4: “You Could Be Mine” de Guns N’ Roses (para Terminator 2: El Juicio Final).

Cuando uno era chico quería ser como John Connor en Terminator 2, no digan que no. El péndex andaba en su propia moto, hackeaba los cajeros automáticos y se iba al mall a jugar videojuegos escuchando Guns N’ Roses en una radio a pilas. Y tenía su propio Schwarzenegger que lo cuidaba del otro Terminator. No se podía ser más zorrón, y escuchando esta canción uno se acercaba a ese nivel de maestría. Maestra.  

Top #3: “The Eye of the Tiger”, de Survivor (para Rocky III)

Esta canción fue tan famosa que se transformó en la canción oficial de cualquier gil que entrene mientras hace deportes. Las películas de Rocky siempre tenían la secuencia en que el compadre entrenaba levantando troncos en la nieve y/o haciendo tiburones con un tanque en la espalda, y ahora cualquiera que haga abdominales escucha esta canción en su cabeza. ¿O me pasa a mí no más? Increíble. 

Top #2: “The Power of Love”, de Huey Lewis and the News (para Volver al Futuro)

No tengo idea si esta canción me gusta. Lo juro, no sé si es buena o es mala, pero está tan pegada a Volver al Futuro que es imposible que no te guste. En el videoclip salen los de la película, y mejor aún, sale el DeLorean, y por lo tanto es una obra de arte que merece nuestra admiración. 

Y finalmente… 


Top #1: “Ghostbusters”, de Ray Parker jr. (para Ghostbusters)

Esta debe ser la canción más pegajosa de la historia de las canciones, y más importante, la canción más pegada a su respectiva película. No es por basurear el trabajo de todos los que hicieron Los Cazafantasmas, pero yo apostaría que sin esta canción nadie se acordaría tanto de los profesionales del cazafantasmismo. El video además tiene cameos de todo Hollywood ochentero, y apuesto que más de alguno lo vio y pensó que todas esas celebridades salían en la película. 

No sé por qué hoy día las películas no tienen “tema central”. Excepto las de James Bond que siguen la tradición y algunas películas de Disney, nadie quiere mojarse el potito filméfilo con un tema.

Y no sé a ustedes pero a mí igual me habría gustado escuchar una canción pegote que tuviera un video donde todos los Avengers salieran bailando en Nueva York, como en el video de Ghostbusters. O un tema central para alguna de Harry Potter donde saliera todo el elenco haciendo un carrete en Howard’s. Piensen en el pobre Phil Collins, o en toda esa gente cesante que no puede ganarse los porotos haciendo temas centrales. Recapaciten, Hollywood, todavía hay tiempo. Que vuelvan los temas centrales.