A todos nos gusta cuando nos dan algo “de yapa”. No sé si es un concepto que existe en otros países, pero por si acaso para nuestros lectores extranjeros, la “yapa” es algo que te dan gratis y que no esperabas recibir.

Por ejemplo cuando uno va a la feria a comprar paltas y el casero después de pesarlas y cobrarlas, te echa una palta adicional y te dice “Ya, ahí va una de yapa”. O “Llévese una naranja también, de yapa”. No sé a ustedes pero a mí cuando me dan algo “de yapa” me voy flotando en una nube de alegría en que la dicha invade mi felicidad, porque no hay nada mejor en esta vida que las cosas gratis.

Y bueno, las tan de moda escenas post-créditos de las películas, son justamente eso, una escena “de yapa”. Un último “Ya vieron la película completa pero aquí tienen una yapa, que les vaya bien y gracias por no piratearnos”. Por culpa de las películas Marvel ahora todo el mundo se queda esperando hasta el final de los créditos por si acaso, y otros estudios están copiando la yapa fliméfila de la escena post-créditos. Pero… ¿Cómo empezó todo?

Para que sepan la primera escena “post-créditos” de la historia del cine (wow) fue la que salía al final de El Gran Robo del Tren, una película del año uno sobre un gran robo a un tren. Puse post-créditos entre comillas, porque las películas antiguas no tenían créditos, pero lo que sale es claramente una escena de estas. Verán, después de la última escena en que todos los ladrones mueren, aparece uno de los ladrones (ya muerto) mirando directamente a la cámara, y le dispara a los espectadores.

¿Qué tal? Ahora ya saben de dónde sacó Éscor Cése la idea de poner a Joe Pesci disparándole a la cámara al final de Buenos Muchachos. Bueno, esta fue la primera vez que pusieron algo “de yapa” al final de la película, para mandar a la gente a la casa tiritona y expectante. Y funcionó, porque recuerden que esta es la época en que la gente era primitiva y salía arrancando cuando el tren se acercaba a la cámara.

Aquí con el disparo varios cayeron muertos, algunos con hemorragia sicológica, y creo que tuvieron que llamar a la ambulancia, que en esta época era una carreta amarrada a la parte de atrás de un dinosaurio, y la sirena era un pájaro chiquitito que le tiraban la cola, y frenaban con los pies pelados de los cavernícolas. Cosas del pasado ustedes cachan.

La primera vez que usaron una escena post-créditos en una película de esta época fue en la película de Los Muppets (1979), donde después de ver todas las letras aparecía Animal y mandaba a la gente para la casa. Muy parecida a la despedida de Ferris Bueller que aparece al final de su película a reírse de la gente por estar todavía en el cine.

En esta época las escenas de yapa eran más simples y muy piola, para que uno se riera por última vez en el cine. Ahora por culpa de Marvel las escenas post-créditos tienen que calentar la sopa y vender la próxima película de la saga. Igual la gozamos, porque si estamos viendo hasta el punto final de los créditos por si sale algo es porque nos gusta la película. Pero reconozco que echo de menos la escena post-créditos que era solamente para darte un último gustito, más que para dejarte enganchado para la próxima película.

¿Cuáles son mis escenas post-créditos favoritas? Yo les voy a contar ahora. Obviamente, SPOILERS de las escenas en cuestión.

8.- El joven Sherlock Holmes.

No sé si alguien se acuerda de esta cuestión, pero era justamente lo que promete el título. Una versión de Sherlock Holmes adolescente, resolviendo misterios y todo, con un Watson cabro chico que lo ayudaba. La produjo Spielberg en los ochenta pero nunca fue tan famosa como otras producciones de Spielberd de los ochenta onda Volver al Futuro, Gremlins, etc. Y lo pulento de la escena post-créditos es que cambia todo lo que vimos antes. Porque verán, el malo de esta película es un compadre equis llamado Profesor Rathe. Bueno al final de la película muestran que el compadre (todo machucado después de la pelea final) llega a un hotel y se registra… Como Moriarty, el archienemigo de Sherlock Holmes. Incluso mira a la cámara y sonríe. Sería como si Batman hubiera peleado toda la película contra un señor Juan Pérez y AL FINAL DE LOS CRÉDITOS revelaran que Juan Pérez era el Joker. Filete. Y nunca hicieron segunda parte.

7.- Arma Mortal 3.

Esta es otra escena post-créditos que no quiere calentar la sopa con segunda parte, sino simplemente mandar a los fans contentos para la casa. La incluyo porque debe ser una de las escenas post-créditos más explosivas de todas, básicamente porque hacen explotar un edificio simplemente para agregar un chistecito más. Buena, Arma Mortal 3.

6.- The Wolverine.

Esta es de las calienta sopa, y existe solo para que uno quiera ver la próxima película de X-Men. Aunque esa película resultó ser X-Men Days of Future Past y lo que pasa en esa película anula completamente esta escena, es de mis favoritas porque debe ser la única escena post-créditos de la historia que me gustó más que la película en que sale. Y me gustó tanto porque volvieron a aparecer los viejos Magneto y Charles Xavier. Después de ver esta escena salí y quise comprar al tiro mi entrada para la próxima película, porque así de efectiva es. No tiene ningún sentido, pero igual.

5.- Napoleon Dynamite.

Qué chistosa es Napoleon Dynamite. Y después de los créditos viene una escena como de cuatro minutos en que muestran la boda de Kip con Lafawnda. Oficiada por el viejujo de la granja de huevos, con casi todos los personajes de invitados. Incluso aparece Napoleon Dynamite en un corcel blanco, etc. Una escena nada que ver con nada que es entera absurda pero que la lleva, no digan que no.

4.- Las de Fast & Furious.

Estas definitivamente caen en la categoría de “mini tráiler de la próxima película”, pero han sido momentos tan Oh My God, que las incluí. La escena post-créditos de Fast Five por ejemplo, anunciaba que el personaje de Michelle Rodríguez que todos creían muerto en verdad estaba vivo. Y el de Fast Six muestra quién va a ser el villano de la próxima película. Y es un compadre tan brígido y con tanta experiencia en el mundo del cine de acción y autos y la palanca de cambio, que varios gritaron cuando el loco apareció. La zorra.

3.- Iron Man.

Esta hay que incluirla porque fue la primera de las escenas post-créditos de Marvel y fue la primera vez que a) Apareció Samuel L. Jackson como Nick Fury y b) El compadre menciona Los Vengadores y dice que Iron Man no es el únio superhéroe que existe. Cuando recién vimos la escena en el cine no la podíamos creer, y nada volvería a ser lo mismo.

2.- Aliens.

Esta técnicamente no es una escena post-créditos, pero igual. Es la variante de la “yapa auditiva” que algunas películas ponen al final de los créditos. Por ejemplo cuando terminan de salir las letras de Gremlins, se escuchan las risas de los monstruitos. Al final de Texas Chain Saw Massacre se escucha el ruido apestoso del flash de la cámara del compadre. Y bueno al final de Aliens se escucha uno de los facehuggers (los monstruos esos como cangrejo que se adhieren a la cara guácatela) caminando de un lado de la pieza al otro. Lo incluyo en la lista porque la primera vez que lo escuché fue porque dejé corriendo la película y casi me dio un infarto.

1.- Y… ¿Dónde está el piloto?

Y mi escena post-créditos favorita es la de Y… ¿Dónde está el piloto?, todo el rato. Esta escena es de las que entran en la categoría “último chiste para mandar al espectador contento a la casa”, pero lo mejor es que cae perfecto para el chiste que están haciendo. Porque nos muestra al pobre viejo que se pasó toda la película esperando al compadre adentro del taxi, con el taxímetro andando. “Le doy veinte minutos más y me voy”, dice más encima. Filete la escena, de hecho me sigo imaginando al viejo adentro del taxi, esperando por los siglos de los siglos.

Opino que las escenas post-créditos debieran ser más así. Más sobre la película que acabamos de ver que sobre las que vienen. Y ojalá no sean tan nerds tampoco. Con la que sale al final de X-Men Days of Future Past tuve que llegar a la casa a hacer trabajo de investigación para cachar quién era ese loco, y esa no es la idea. Si nos vamos a quedar a estorbar al compadre que barre el cine, que sea para gozar ahí y no tarea para la casa. ¿Es mucho pedir, Hollywood?