La Discriminación Silenciosa

Aunque la discriminación sexual acapara portadas, existe un tipo mucho más extendido y silencioso de discriminación: la social.

Por Martín De Mussy @mdemussy | 2013-07-25 | 09:27
Tags | discriminación, sociedad, clases sociales, ley zamudio
"Probablemente cada uno de nosotros se ha sentido discriminado aunque sea en algún momento"

Ayer se celebró el primer aniversario de la promulgación de la Ley Antidiscriminación, también conocida como la Ley Zamudio. Y efectivamente fue una celebración. Una oportunidad para festejar la diversidad, las diferencias y la tolerancia que nos hace cada vez más responsables con los otros y con nosotros mismos. Sin embargo también fue una ocasión para recordar que muchas veces podemos caer sin darnos cuenta en lo que tanto nos molesta: verdaderos discriminadores con la persona del lado.

¿Por qué? Sencillamente porque la discriminación no se agota sólo en quienes excluyen y miran en menos a quienes tienen una diferencia o discapacidad –como sucede de forma más notoria con quienes tienen una invalidez física o viven una diferente orientación sexual- sino que también existe y la hacemos real, aunque de forma más solapada, con quienes tienen otra realidad sociocultural o incluso aún con quienes tienen un diferente nivel de escolaridad. Muchas veces son cientos, miles o incluso millones de personas las que reciben una mirada condescendiente o un suspiro de lástima en vez de oportunidades. Y eso sin darnos cuenta, también es una forma de separación. Una discriminación silenciosa.

Cuántos trabajos, oportunidades de negocios, acuerdos, reuniones o contrataciones no se realizan porque quién está postulando es parte de ese inmenso grupo de cinco millones de adultos que no han terminado el colegio. Cuántos niños quedan fuera de una invitación o son excluidos de un grupo por vivir en otra comuna o tener una casa diferente a la de los compañeros. Cuántas personas quedan fuera del círculo de las oportunidades por pensar, parecer o sencillamente ser diferentes. Y finalmente, cuántas veces nosotros mismos hacemos la diferencia en base a la información acotada que tenemos sin si quiera tratar de conocer más a quienes tenemos en frente.

Miremos entonces a nuestro alrededor y actuemos sin marcar diferencias. Cada persona es única y precisamente eso es lo que nos hace tan especiales y complementarios. Probablemente cada uno de nosotros se ha sentido discriminado aunque sea en algún momento y por eso podemos contar en primera persona lo difícil que es vivirlo. Aprendamos de la experiencia entonces. Se puede construir un país más inclusivo, sin discriminar de forma solapada o silenciosa, haciendo patente que todos merecemos las mismas oportunidades.

CONSULTA CIUDADANA SOBRE DISCRIMINACIÓN

El gobierno lanzó ayer la primera consulta ciudadana sobre discriminación, a través del sitio web www.nomasdiscriminacion.cl, que se podrá responder hasta el 14 de agosto. 

La consulta, de 15 preguntas, busca indentificar tipos, causas, situaciones y lugares en que las personas se sienten discriminadas, para poder elaborar políticas más efectivas.

Responde la encuesta aquí.