El Héroe que necesitamos

Nuestro lector Francisco Fierro rescata el ejemplo de vida y prioridades que nos muestra el golfista Phil Mickelson, reciente ganador del Abierto Británico de Golf

Por Francisco Fierro C. | 2013-07-25 | 12:38

Quienes llegan a realizarse en el deporte en las más altas categorías son de por sí ejemplos de esfuerzo, y no solo ellos, sino que también sus familias y todos los que pusieron de su parte para que alcanzaran ese lugar. Lamentablemente, algunas veces estos se nos caen por hacer trampa para llegar ahí y terminan siendo una decepción para quienes siguieron sus carreras y descubren que era todo basado en el doping. Esta columna no es sobre ellos.

Al héroe que quiero hacer referencia no es más que Phil Mickelson quien nuevamente se alzó con un Major de golf esta temporada, esta vez el más importante "the Open"(el abierto británico).

Phil Mickelson es considerado por los fans uno de los jugadores más queridos del circuito del PGA más allá del espectáculo que logra brindar en la cancha. Esto porque pese a los muchos millones ya ganados en el golf, los que lo siguen sienten que él disfruta jugar pese al resultado y a su vez, siempre se detiene para saludar a los seguidores, dándose el tiempo para dar autógrafos. Además, Phil tiene el físico de una persona normal, lo que hace a las personas aficionadas sentirse aún más identificado con el gran jugador.

Sin la necesidad de detallar el gran golf que jugó durante el último torneo, quiero hacer hincapié en los detalles que han rodeado este 2013 para este gran jugador. Días antes de que se jugara el major que era más esquivo para él (el U.S. Open en el que ha sido segundo seis veces en su carrera), se graduaba su hija. Con un ejemplo de paternidad, decidió viajar solo horas antes de que comenzara el torneo, de tal forma de poder acompañar a su hija en su graduación. Pocas veces en el deporte profesional uno logra saber de este tipo de anécdotas que hablan muy bien de alguien como él.

El golf como deporte individual logra generar grandes sentimientos en torno a los jugadores, pero el oriundo de San Diego, California, ha llevado a casi un mismo nivel de estrellato a su caddie, Jim 'Bones' Mackay (quien aconseja en cancha y acarrea los palos del jugador). Su relación ya lleva 20 años y se ha caracterizado por un trato igualitario y de gran amistad entre los dos. Sin ir más lejos, el domingo pasado, al ganar el abierto británico, Bones parecía más emocionado que el mismo Mickelson y el jugador recalcó con énfasis lo importante que era para los dos el triunfo. Además esta no es la primera vez que lo hace, y siempre le da el crédito que merece a Bones.

De esta forma, se completó la postal el día domingo, en donde Phil apareció con toda su familia en su victoria más importante, junto a su entrenador y a Bones, armando una foto familiar como ninguna otra en uno de los más importantes escenarios del golf.

Estos valores, son los más importantes de recalcar, la prioridad de la familia en torno al trabajo, la entrega al máximo en el deporte, el esfuerzo entregado y la entrega del crédito a quienes forman parte del triunfo. 

Todas estas características hacen que Phil, sea uno de esos héroes que necesitamos, esos que no sólo son exitosos en el deporte, sino que logran este espacio para dar un ejemplo de vida.